BARCELONA (9 Abril 2017).- Mercedes le ganó la batalla a Ferrari en China. La
escudería alemana aprendió en Australia que se acabaron los paseos triunfales
de las tres últimas temporada y en Shanghái dio un golpe de autoridad
-acompañado por la fortuna en el inicio de la carrera- con el incontestable
triunfo de Lewis Hamilton. El tricampeón mundial ganó su primera carrera de la
temporada -la 54 de su carrera- y colidera con Vettel el Mundial.
Hamilton realizó una carrera perfecta y lo hizo en
solitario ante el Ferrari de Sebastian Vettel y el Red Bull de Max Verstappen,
los dos pilotos que le acompañaron en el podio. El accidente de Antonio
Giovinazzi en la cuarta vuelta fue decisivo en su triunfo después de que Ferrari
se adelantara a Mercedes en la toma de decisiones con la entrada de Vettel a
boxes para cambiar neumáticos nada más comenzar.
Un trompo de Valtteri Bottas en la séptima vuelta
dejó al finlandés fuera de la lucha por el podio y sin poder intermediar durante
el resto de la carrera con los rivales del británico. Hamilton se vio solo
frente a sus rivales, pero el británico dio un golpe sobre la mesa con una
carrera casi perfecta que se vio favorecida por el asfalto seco en el que se
rodó a medida que avanzaba el gran premio.
La carrera que realizó Max Verstappen merece un
capítulo aparte y un lugar en la videoteca. El holandés de Red Bull puso el
espectáculo sobre la pista remontando desde la decimosexta posición hasta la
segunda posición. Verstappen peleó con Sebastian Vettel por esa segunda plaza
pero este año los Red Bull están un paso por detrás de Ferrari y acabó
cediendo. Y en la última vuelta tuvo un bonito duelo con su compañero de
equipo, Daniel Ricciardo, para aferrarse a un merecido lugar en el podio.
Verstappen fue el héroe de la carrera acabando
tercero tras salir decimosexto
Tras las tres grandes escuderías del Mundial, Carlos
Sainz cruzó la línea de meta en séptima posición. El piloto madrileño realizó
una sensacional carrera, remontando desde la decimonovena plaza después de un
trompo de su Toro Rosso al inicio de la prueba. Con una acertada selección de
neumáticos durante la carrera, el madrileño fue remontando posiciones hasta
acabar ‘el primero de los mortales’ como se conoce a los pilotos que no tienen
coches para competir con los inalcanzables bólidos de Mercedes, Ferrari y Red
Bull.
La cruz volvió a ser Fernando Alonso, que volvió a
quedarse sin ver la bandera a cuadros. Fue una carrera para la esperanza del
asturiano, que se colocó noveno tras salir en la decimotercera posición y
estuvo durante toda la carrera en los puntos. El asturiano llegó a estar sexto
en carrera, pero esta vez no fue el motor, sino un palier, lo que le dejó fuera
de combate en la vuelta 36 después de que Carlos Sainz lo adelantara.
La lluvia que cayó sobre Shanghái dio a los
neumáticos todo el protagonismo en el inicio de la carrera. Todos los coches
calzaron los intermedios, salvo Carlos Sainz. La primera decisión táctica la
tomó Ferrari que hizo entrar a Vettel a boxes rápidamente para calzar las gomas
blandas. El golpe estratégico parecía que podía ser decisivo pero todo se fue
al traste con el accidente de Antonio Giovinazzi en la cuarta vuelta. Entró el
safety car en pista y todas las escuderías volvieron a boxes para poner
neumáticos blandos.
El accidente de Giovinazzi fue clave en el triunfo
de Hamilton en el Gran Premio de China
El accidente de Giovinazzi fue clave en el triunfo
de Hamilton en el Gran Premio de China (Mark Schiefelbein / AP)
Hamilton fue el gran beneficiado de la jugada al
recuperar nuevamente la primera plaza para empezar a gestionar su ventaja. Su
Mercedes rodaba a un gran ritmo con los dos Red Bull por delante de los
Ferrari. El británico empezó a tirar, a pesar del desgaste de sus neumáticos,
para conseguir una ventaja suficiente que le permitiera volver a boxes a poner gomas
nuevas para afrontar la parte final de la carrera sin abandonar la primera
posición.
Lo hizo, con 15 segundos de ventaja sobre Ricciardo,
en la vuelta 37 y volvió a la pista con una diferencia de casi medio minuto
sobre Vettel. Al alemán ya no le quedaba otra que luchar por la segunda
posición que le mantuviera al frente de la clasificación del Mundial.
Lewis Hamilton se fue solo ante el triunfo mientras
la carrera centraba su interés en quienes iban a acompañarle en el podio.
Vettel adelantó a Ricciardo y el australiano se centró en no ser superado por
Verstappen. El holandés no quiso saber nada de las órdenes de Red Bull y hasta
les mandó callar en las últimas vueltas. Sabía que merecía la tercera plaza
tras una carrera para enmarcar y al final se acabó haciendo justicia.
Clasificación del Gran Premio de China
1. Lewis
Hamilton (GBR/Mercedes)
2. Sebastian
Vettel (ALE/Ferrari)
3. Max
Verstappen (HOL/Red Bull-TAG Heuer)
4. Daniel Ricciardo (AUS/Red Bull-TAG Heuer)
5. Kimi Räikkönen (FIN/Ferrari)
6. Valtteri Bottas (FIN/Mercedes)
7. Carlos Sainz Jr (ESP/Toro Rosso-Renault)
8. Kevin Magnussen (DIN/Haas-Ferrari)
9. Sergio Pérez (MEX/Force India-Mercedes)
10. Esteban Ocon (FRA/Force India-Mercedes)
11. Romain Grosjean (FRA/Haas-Ferrari)
12. Nico Hülkenberg (ALE/Renault)
13. Jolyon Palmer (GBR/Renault)
14. Felipe Massa (BRA/Williams-Mercedes)
15. Marcus Ericsson (SWE/Sauber-Ferrari)
Abandonos
Lance Stroll (CAN/Williams): problema en la
dirección 1ª vuelta
Antonio Giovinazzi (ITA/Sauber): accidente 4ª vuelta
Stoffel Vandoorne (BEL/McLaren-Honda): problema
mecánico 18ª vuelta
Daniil Kvyat (RUS/Toro Rosso): tproblema en la
dirección 19ª vuelta
Fernando Alonso (ESP/McLaren-Honda): problema
mecánico 34ª vuelta
Clasificación del Mundial (pilotos)
1. Lewis Hamilton (GBR) 43 pts
1. Sebastian
Vettel (ALE) 43
3. Max
Verstappen (HOL) 25
4. Valtteri Bottas (FIN) 23
5. Kimi Räikkönen (FIN) 22
6. Daniel Ricciardo (AUS) 12
7. Carlos Sainz Jr (ESP) 10
8. Felipe Massa (BRA) 8
9. Sergio Pérez (MEX) 8
10. Kevin
Magnussen (DIN) 4
11. Daniil Kvyat
(RUS) 2
12. Esteban Ocon (FRA) 2
Clasificación del Mundial (constructores)
1. Mercedes-AMG 66 puntos
2. Ferrari 65
3. Red Bull 37
4. Toro Rosso 12
5. Force India
10
6. Williams 8
7. Haas 4
Por
ANDRÉS DEL CASTILLO/La Vanguardia
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