ANDY MURRAY CAE ANTE SAM QUERREY Y EXPONE EL NÚMERO UNO EN WIMBLEDOM

LONDRES (12 Julio 2017).- Sam Querrey dio el gran golpe en Wimbledon y reabrió la lucha por el número uno del mundo. El estadounidense, 24º favorito, derrotó a Andy Murray en cuartos de final por 3-6, 6-4, 6-7 (4), 6-1 y 6-1 y se medirá en las semifinales a Marin Cilic, que se deshizo ( 3-6, 7-6 (6), 7-5, 5-7 y 6-1) del verdugo de Nadal, Gilles Müller. 

Con esta derrota, el escocés, errático a lo largo de la temporada, concede a Novak Djokovic, cuarto en el escalafón, la posibilidad de volver a lo más alto del ránking si gana el torneo. Aun eliminado en octavos, Rafael Nadal, número dos, también estrecha el cerco. 

El lunes aparecerá con 7.965 puntos, frente a los 8.110 del jugador de Dunblane.Todavía inflamada por la presencia de Johanna Konta en las semifinales femeninas, la afición británica se las prometía venturosas con la posibilidad de contar con dos de los suyos en las rondas definitivas. Murray, quien tras su excepcional segunda parte de 2016, en la que, entre otras cosas, ganó su segundo Wimbledon y su segundo oro olímpico y su primera Copa Masters, implosionó severamente, sometido a problemas físicos e incapaz de soportar la presión del número uno, acabó derrumbándose ante Querrey. Pase lo que pase en lo que resta de torneo tiene ante sí un enorme legado que defender de aquí a fin de curso.

El estadounidense alcanza así por primera vez las semifinales de un major, un año después de eliminar a Djokovic en la tercera ronda de este mismo torneo. Su júbilo sobre la hierba de la Central contrastaba con la mirada perdida de Judy Murray, la madre de Andy, descorazonada en el palco. "Todavía estoy un poco en estado de 'shock'. No empecé bien, pero supe continuar con mi plan. Es un sueño hecho realidad estar en una semifinal, y más aún en Wimbledon. Voy a disfrutar cuanto pueda de este momento y luego tratar de estar listo para las semifinales", dijo el héroe del día, el primer semifinalista estadounidense de un major desde Andy Roddick en 2009, el hombre que ha liquidado en dos años consecutivos en Wimbledon al defensor del título. Querrey, con 27 saques directos para un total de 70 golpes ganadores, obtuvo la recompensa a su valerosa actitud, frente a un adversario que no escapó de la rémora de un tenis demasiado contemplativo, un síntoma a lo largo de toda la temporada. Camino de los 30 años, el gigante de San Francisco, ganador de nueve títulos, el último de ellos hace unos meses, ante Nadal, en Acapulco, suscribió el triunfo más importante de su carrera.



Por JAVIER MARTÍNEZ/El Mundo


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