SANTIAGO (16 Enero 2018).- El Papa Francisco llegó finalmente a Chile, la
primera visita papal desde que Juan Pablo II pasó por ese país sudamericano en
1987. La sociedad chilena recibe al jefe de la Iglesia católica en un clima de
desconfianza por los escándalos de pedofilia que sacuden la institución.
“Es una visita episcopal. Todos los recibimos con la
mano abierta”, dijo a RFI Mauricio Acuña mientras esperaba el paso del Papa
Francisco por las calles de Santiago de Chile. “Después de tanto tiempo de no tener
a un Papa en Chile, encima que es vecino. Estamos todos felices. El mundo
católico está feliz”.
Es la sexta vez que el Sumo Pontífice visita la
región. Con una hora de retraso Francisco aterrizó en la capital chilena, donde
fue recibido por la presidenta Michelle Bachelet.
Luego de visitar la parroquia San Luis Beltrán,
donde rindió homenaje a la figura del "obispo de los pobres",
Francisco salió a recorrer en "papamóvil" algunas calles de la ciudad
hasta la Nunciatura, donde pasará las tres noches que estará en Chile.
“Con mucha fe y mucha emoción”, dijo Jacqueline
sobre su espera al borde la avenida minutos antes que Francisco pasara
saludando en el papamóvil. “Ir a verlo a Roma es muy difícil. Que nos haya
elegido a nosotros y no a su país es también una gran bendición”, dijo haciendo
referencia a que el Papa todavía no visitó su natal Argentina.
“Yo soy peruana, vine con mi familia y mis hijos.
Estamos emocionados, somos súper católicos. Estamos agradecidos a Dios, y él es
el representante de Dios aquí en la Tierra” dijo Karin Salas. A pesar de la fe
manifiesta de algunos, las calles no se llenaron para saludar el paso del Sumo
Pontífice cómo se esperaba.
En cambio sí hubo protestas en algunos partes, como
en la simbólica Plaza Italia. Manifestaciones que estuvieron controladas por la
policía, sin grandes enfrentamientos.
“Estoy molesta que el Estado siendo laico haya
gastado tanto dinero en la visita del Papa. Y además dejaron de lado muchos
juicios contra curas pedófilos por la visita del Papa” dijo a RFI Antonia.
El pasado viernes se registraron ataques a cinco
iglesias en Santiago y la vecina localidad de Melipilla, por supuestos grupos
de anarquistas.
El papa llega al país más crítico con la iglesia
católica de América Latina y en pleno cambio social que acaba de aprobar el
aborto terapéutico y tramita en el Parlamento el matrimonio homosexual, tras la
adopción de la unión civil de parejas del mismo sexo.
“La visita de este Papa representa años y años de
opresión sobre la comunidad LGTB chilena y del mundo”, dijo a RFI Beto Pérez.
“Acá en Chile estamos luchando por incluir en las reformas la educación no
sexista. La excesiva presencia de la Iglesia católica en el sistema de
educación chileno deja afuera a las personas trans, gays, lésbicas y a
cualquier otra persona que tenga una identidad distinta a la heterosexual”.
El papa argentino tiene previsto un encuentro con la
presidenta, agnóstica confesa e impulsora de esta transformación social, que
entregará el poder el 11 de marzo al conservador Sebastián Piñera.
Las autoridades esperan que cerca de 1,2 millones de
personas -buena parte de ellas, argentinas, bolivianas y peruanas para ver al
papa, que será resguardado por unos 18.000 policías.
No hay comentarios.: