KANY GARCÍA: EVOLUCIÓN MUSICAL A OTRO NIVEL


Kany García tituló su nuevo álbum “Contra el viento”, pero esta, su sexta producción de estudio bajo el sello Sony, cuenta con todo a su favor para seguir elevando la trayectoria de esta cantautora, cuyo talento y capacidad para crecer y evolucionar a nivel artístico no deja de sorprender.

Si hace un año cuando lanzó “Soy yo” afirmamos que García acariciaba la madurez como compositora e intérprete, al escuchar esta nueva selección de piezas reafirmamos que estamos ante una artista cuya trayectoria continuará en expansión.


Once composiciones integran este disco, capitaneado por el productor y director musical de Kany, el joven boricua Marcos Sánchez. Cada melodía es precedida por un pensamiento a cargo de figuras como Mercedes Sosa, Natalia Lafourcade, Soledad Pastorutti, Lila Downs, Natti Natasha, Thalía, Sofía Vergara e incluso Shela de Jesús, madre de Kany.

“Contra el viento” arranca con “Así voy yo”, un tema poderoso en el que Kany denuncia con un nivel de lirismo exquisito y con mucha valentía la invisibilidad institucionalizada que sufren quienes no llenan los parámetros de “normalidad” que promueve la hipocresía social.

Le sigue “Remamos”, segundo sencillo promocional del álbum, que estrena hoy con el lanzamiento oficial del disco. Este dúo con Natalia Lafourcade podría fácilmente colocarse en el renglón de Canción del Año en más de una premiación importante. La combinación de estas voces es de una belleza pocas veces lograda. Es un poema al valor de pensar y vivir en colectivo, liberado de individualismos.


Con “Me mudé”, Kany aborda el tema de la violencia de género desde un punto de vista de empoderamiento y valor. Nuevamente, Kany sorprende con su talento para expresar con palabras imágenes, pensamientos y sensaciones.

Si en “Soy yo”, Kany se lanzó a los ritmos brasileños con “Sácala a bailar”, ahora con “Tu amor es como un río” se introduce en el género de la bachata con un tema romántico y poético refrescante.

“Aunque sea un momento” va en el estilo interpretativo y lírico con el que Kany conquistó a su fanaticada desde su debut en 2007. Es un retrato de ese momento en la vida en el que todo se desploma y donde no queda otra que llorar, para luego seguir adelante.

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