LA POLICÍA DE CAROLINA DEL SUR DETIENE SOSPECHOSO TIROTEO DEJÓ 14 PERSONAS HERIDAS
El jefe de la policía de Columbia, W.H.
"Skip" Holbrook, dijo que Jewayne M. Price, de 22 años, que fue una
de las tres personas detenidas inicialmente por las fuerzas del orden como
persona de interés, sigue bajo custodia policial y se espera que sea acusado de
portación ilegal de armas.
Catorce personas resultaron heridas durante el tiroteo
en el Columbiana Centre, dijo Holbrook en un comunicado de prensa el sábado.
Las víctimas tienen entre 15 y 73 años.
Holbrook dijo que no se ha informado de víctimas
mortales, pero que nueve personas recibieron disparos y cinco sufrieron heridas
mientras intentaban huir del centro comercial para ponerse a salvo.
La Policía dijo que la víctima de 73 años sigue
recibiendo tratamiento médico, pero los otros heridos han sido dados de alta de
los hospitales locales o serán dados de alta en breve.
"No creemos que esto haya sido al azar",
dijo Holbrook. "Creemos que se conocían y que algo llevó a los
disparos".
Los investigadores creen que al menos tres sospechosos
exhibieron armas de fuego dentro del mall, pero están trabajando para
determinar cuántos sospechosos dispararon armas. La Policía informó que se
incautó al menos un arma de fuego.
Daniel Johnson dijo que él y su familia estaban de
visita desde Alabama y estaban comiendo en el patio de comidas cuando
escucharon por primera vez los disparos y empezaron a ver a la gente correr.
Johnson dijo que la gente gritaba llamando a sus hijos
y parejas, derribando mesas en el patio de comidas mientras huían.
"Todo el mundo intentaba salir", recordó
Johnson. "Cuando salía, se veían los cochecitos de bebé volcados, los
teléfonos de la gente y las llaves abandonadas. Fue una situación
agitada", señaló.
Johnson dijo que reunió a su esposa, su hija y su hijo
y comenzó a dirigirse hacia la salida después de dejar que la multitud se
despejara un poco.
"Lo que más me importaba -y no quiero sonar
egoísta- era asegurarme de que nuestra familia estaba bien y sacarlos a salvo
porque esto no es algo que nos guste hacer el fin de semana de Pascua",
dijo.
La fuerte presencia policial continuó en la zona horas
después del tiroteo, aunque los agentes empezaron a dejar pasar más tráfico por
las calles que rodean los centros comerciales y las galerías que suelen estar
llenas los fines de semana.
Los agentes también estaban apostados en el exterior
de un hotel cercano designado como zona de reunificación para las personas en
el lugar del tiroteo y sus familias.
Los trabajadores de un par de tiendas permanecieron
agrupados en el estacionamiento, en su mayor parte vacío, el sábado por la
tarde, esperando a que la Policía les permitiera volver a entrar para recuperar
las llaves de sus autos y sus pertenencias personales para poder marcharse.
Dijeron que no oyeron ni vieron nada durante el tiroteo, pero siguieron el
sistema de alerta del centro comercial y fueron evacuados por la Policía poco
después. Los entrevistados se negaron a dar sus nombres, citando las políticas
de la empresa.
"El acto de violencia aislado y sin sentido de
hoy es extremadamente perturbador y nuestros pensamientos están con todos los
afectados", dijo Columbiana Centre en un comunicado. "Estamos
agradecidos por la rápida respuesta y el apoyo continuo de nuestro equipo de
seguridad y nuestros socios en la aplicación de la ley", agregó.
El de ayer es el último de una serie de tiroteos en o
cerca de centros comerciales en todo Estados Unidos.
Un joven de 15 años recibió un disparo en la cabeza el
miércoles en el centro comercial Atlantic Terminal de Brooklyn. Se cree que sus
heridas no ponen en peligro su vida. Las autoridades dijeron que estaba con un
grupo de chicos cuando se pelearon con un segundo grupo.
El martes, el propietario de una zapatería del sur de
California hirió por error a una niña de 9 años mientras disparaba a dos
ladrones en el centro comercial de Victor Valley, según la Policía.
Y a principios de este mes, la Policía informó que
seis personas murieron y otras 12 resultaron heridas en Sacramento, California,
durante un tiroteo entre bandas rivales al cierre de los bares en una zona muy
concurrida cerca del centro comercial Downtown Commons y del Capitolio estatal.
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