La princesa Leonor se despide de Santo Domingo con una fiesta que termina con arrestos en Elcano por conducta inadecuada
La joven cadete se encuentra ya camino de Nueva York, en la que será una de las últimas escalas del buque escuela.
Llegará el próximo 5 de junio.
Posteriormente volverá a España, parando en algunos puertos de España: Gijón, Ferrol, Marín y, finalmente, Cádiz, donde terminará la travesía el próximo 21 de julio.
Precisamente fue de la ciudad gaditana desde donde zarpó Leonor el pasado 11 de enero. Desde entonces ha visitado Salvador de Bahía (Brasil), Montevideo (Uruguay), Punta Arenas y Valparaíso (Chile), Lima (Perú), Panamá, Cartagena de Indias y Santa Marta (Colombia) y Santo Domingo (República Dominicana), donde estuvo hasta este sábado, antes de poner rumbo a Estados Unidos.
Una parada que, según han deslizado algunas fuentes cercanas al buque, ha tenido algún que otro episodio convulso.
Lo que debía ser una visita más dentro del itinerario, acabó envuelta en cierta polémica por una noche de fiesta que se salió de control.
La princesa Leonor revoluciona el Malecón
Según fuentes cercanas al entorno del buque, Leonor aprovechó una noche libre para salir con un grupo de guardiamarinas a recorrer el popular Malecón dominicano.
Lo que comenzó como una velada tranquila y festiva, en un ambiente relajado propio de la juventud, pronto se convirtió en un problema para su equipo de seguridad.
La presencia de la princesa no pasó desapercibida, y numerosos curiosos comenzaron a acercarse, algunos incluso intentando sacarse selfies o grabar vídeos sin consentimiento.
La escolta personal de la princesa se vio obligada a intervenir con firmeza para proteger su intimidad y evitar nuevas filtraciones.
Ya anteriormente, durante escalas en países como Chile, Brasil o Uruguay, Leonor había sido fotografiada en situaciones comprometidas, como paseos en centros comerciales, salidas nocturnas o incluso en bikini junto a un compañero del Elcano con quien se le ha relacionado sentimentalmente.
Arrestos en el Juan Sebastián Elcano
En esta ocasión, si bien Leonor mantuvo su habitual comportamiento educado y respetuoso, varios testigos aseguran que al final de la noche se encontraba algo desinhibida, un tanto "chisposa", lo que obligó a redoblar los esfuerzos de su equipo de seguridad.
Conscientes de que la situación podía volverse difícil de manejar y terminar en un incidente mediático, los guardaespaldas decidieron retirarla discretamente del lugar, evitando así cualquier posible escándalo que pudiera afectar la imagen de la Casa Real.
Sin embargo, no todos los integrantes del grupo corrieron con la misma suerte. Algunos de los jóvenes cadetes del Elcano no lograron mantenerse dentro de los límites permitidos.
Según se ha confirmado, varios terminaron arrestados por conducta inadecuada tras excederse en el consumo de alcohol y generar altercados menores. Aunque los hechos no revistieron gravedad, fueron lo suficientemente serios como para aplicar sanciones disciplinarias. El reglamento del buque es claro: no se permite subir bebidas alcohólicas a bordo ni presentarse en malas condiciones físicas o mentales.
Fuente: EL NACIONAL.CAT
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