SANTO DOMINGO.- Trujillo el Tirano vuelve al tapete. Ramfis Domínguez Trujillo, uno de sus nietos yvicepresidente ejecutivo de la Fundación Rafael Leonidas Trujillo Molina, ha alegado que en la nueva Constitución se derogó la ley 5880-62 que prohíbe manifestaciones y loas a favor de la Era de su abuelo dictador.
El nieto del dictador Trujillo en un documento enviado a El Nacional dice que quedó implícitamente derogada precisamente “por aberrante, antidemocrática e inconstitucional, porque la libertad de expresión es tan inherente a la democracia como lo es el fuego y la luz”.
“Esos individuos se escudan no solo de esta monstruosidad jurídica, sino también de un fallo vergonzoso para el país en el que se prohíbe difusión del libro de la señora María de los Angeles Trujillo de Domínguez, Angelita, Trujillo mi Padre, en mis memorias y el desempeño de la fundación Trujillo” expresa.
Domínguez Trujillo dijo que el 24 de octubre la familia hizo un acto histórico-cultural para conmemorar la fecha natalicia del Generalísimo, evento que dijo a pesar de las lluvias resultó ser animado y concurrido y prevaleció ambiente de entusiasta cordialidad.
Sin embargo, dijo que “lamentable que un sencillo y lúcido evento resultara perturbador a los conocidos personajes de antitrujillismo profesional”.
Añadió que estos de inmediato rasgaron sus vestiduras y acudieron a los medios para repetir las acostumbradas diatribas y amenazas, a la vez que buscaban amparo “en la obsoleta ley 5880-62” .
El nieto de Trujillo manifestó que esa ley es un dictamen que obedece exclusivamente a los intereses “de este pequeño sector de antitrujillistas recalcitrantes, y en evidente detrimento al derecho universal y de nuestra Carta Magna de libre expresión”.
No obstante, expresó que tanto la Fundación Rafael Leonidas Trujillo y la familia Trujillo “han sido y seremos siempre respetuosos de ese fallo, comprendiendo que el gobierno del generalísimo Trujilo laboró incansablemente a favor de la creación y el fortalecimiento de nuestro sistema jurídico y por ende nos corresponde poner el ejemplo de respeto”.
“Es, además, inaudito que estos señores, que para sus afanes y pretensiones de desacreditar y despojar la historia de los estelares 30 años de la Era de Trujillo, cuenten con las más inverosímiles complacencias, y recursos tan sustanciales como es el caso del llamado Museo de la Resistencia ”, dice.
Agregó que “esa cosa donde obligatoriamente llevan los niños de las escuelas, para oír lo malo que fue Trujillo y lo bueno que es Fidel Castro y resulta escalofriante que esa anti-historia sea sostenida con una indignante asignación gubernamental que no se compadece ante la precariedad de un erario al borde de la quiebra”.
Manifestó que por esos excesos es que obliga ahora la imposición de una onerosa reforma fiscal.
Domínguez Trujillo indicó que “lo mismo ocurre con el Archivo General de la Nación , convertido en una tribuna del antitrujillismo e igualmente sostenido con otro presupuesto que válgame Dios”.
Sostuvo que “resulta risible que estos señores de la llamada industria del anti Trujillismo les cunda el pánico y se aterroricen por un evento familiar”.
Por ALBERTO CAMINERO/El Nacional
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