La resolución fue sometida por el concejal perredeista Diomar de la Rosa Peña.
Explicó que el uso de GLP en el transporte escolar constituye una “bomba de tiempo” y genera contaminación ambiental, factores que además de poner en riesgo las vidas de los niños van en detrimento de la calidad del medio ambiente.
Según la resolución municipal en proyecto los vehículos del transporte escolar deberán identificarse con una franja amarilla que diga “transporte escolar”.
No hay comentarios.: