NUEVA YORK.- Rosa
María Guarino, una dominicana, cuyos familiares y abogado alegan sufre
perturbaciones mentales fue acusada por los fiscales de Salem (Massachusetts)
de robarse un automóvil, manejar drogada y otros delitos.
La policía dijo que
la mujer de 31 años de edad, hurtó el auto que estaba estacionado en una calle
del poblado, estaba "arrebatada" por el consumo de crack y condujo
bajo los efectos de sustancia controlada, además de resistirse al arresto
escapando de las autoridades y poniendo en peligro las vidas de docenas de
transeúntes y conductores.
La Fiscalía informó
que Guarino podía ser imputada de otros delitos graves.
Reside en el 20 de
la avenida Crane.
Mientras estaba
detenida en una celda, comenzó a gritar como enloquecida que la dejara salir
del cubículo. Su abogado Gary Zerola dijo que los cargos de los que se acusa a
la dominicana son incompatibles con su conducta anterior.
Los familiares de
la sospechosa dijeron que padece una enfermedad y toma medicamentos para
controlar, pero no especificaron el tipo de afección que padece.
El juez Michael
Laurenzano le negó la fianza y la puso en manos de un psicólogo que evaluará su
condición mental.
El jurista sostiene
que cree que su clienta no tiene vicios de psicotrópicos a pesar de que fue
ella misma la que les dijo a los oficiales que consume crack, estando bajo
arresto.
Guarino es madre de
un niño de 10 años de edad que vive con ella y la abuela materna.
Otros dos cargos
por robos de autos y delitos relacionados, les fueron sumados en el expediente
a la señora Guarino y aceptados por el juez.
Los investigadores
dijeron que poco después de las 11:00 de la noche del jueves de la semana
pasada, Guarino fue vista actuando de manera extraña en las inmediaciones de
una tienda de la cadena "Stop and Shop" situada en una gasolinera de
Peabody, se acercó a una mujer que salió del negoció e intentó robarle el
carro.
Otra mujer que
conducía un Chevrolet Prizm color rojo, se acercó para tratar de ayudar, pero
Guarino aprovechó el momento y la despojó del vehículo, siendo vista por la
avenida Loring.
Se inició una
persecución por el centro de Salem. Ella atravesó la Plaza Riley, siguió por la
calle Norman y en la calle Summer fue interceptada y cercada por patrulleros
policiales que la arrestaron allí.
A punta de pistola,
se le ordenó salir del vehículo. Comenzó a gritar y a chillar, creando un
escándalo en la vía pública.
"Estaba como
maníaca y diciendo cosas incoherentes", señala el expediente.
Por MIGUEL CRUZ TEJADA
No hay comentarios.: