BARCELONA (16 Octubre 2014).- Gerard Piqué, jugador del Barcelona y de la
selección española, protagonizó en la madrugada del pasado lunes un incidente
con miembros de la Guardia Urbana de Barcelona, al regreso del partido que
disputó en Luxemburgo con La Roja, incidentes que han sido confirmados por el
entorno del central catalán, que con matices, han reconocido los hechos por los
que fue multado.
Según consta en las diligencias abiertas, desvelados por La
Vanguardia, el origen de la denuncia radica en que el vehículo donde se
encontraban Piqué y su hermano Marc llevaba “15 minutos parado en el carril bus
que hay en la calle Trías Fargas, entorpeciendo la circulación de los taxis que
tienen parada en esa misma zona'. Fuentes próximas al jugador desmienten la
mayor: “Ni dos minutos llevaban parados”, pero avisan: “Da igual, Gerard
asumirá las consecuencias de la denuncia por un hecho que lamenta”.
Tras ser multados los hermanos Piqué, que se encontraban
en el interior del vehículo, Gerard discutió con los agentes de la patrulla, a
quienes reprochó su actitud con frases como 'me tenéis envidia porque soy
famoso', 'me estáis multando porque vais a comisión, porque no tenéis dinero y
os tenéis que llevar comisión', 'esta denuncia va a quedar en nada porque llamo
a tu capo y me la quita', 'voy a hablar con tus jefes y se te va a caer el
pelo', 'sois unos chulos y os creéis los amos del mundo por llevar ese uniforme
y multar a la gente', 'esta multa la va a pagar tu padre', 'sois una vergüenza,
me da asco vuestro trabajo y la Guardia Urbana es una puta vergüenza', que
según desveló La Vanguardia constan en el informe policial. Fuentes del entorno
del jugador aseguran que “de lo dicho, la mitad. Es la palabra de Gerard contra
la de la Guardia Urbana, pero no dijo ni la mitad de lo que dicen que dijo”.
Según el relato de los hechos que se desprende de la
denuncia, los agentes entregaron la multa al hermano del jugador, que había
permanecido dentro del vehículo. Piqué se la arrancó de las manos, hizo una
pelota con el papel y la arrojó a los pies de los urbanos. Acto seguido, se fue
con unos amigos hacia la puerta de acceso del Casino de Barcelona, a escasos
metros donde se produjo el incidente. Según testigos presenciales, información
confirmada por el entorno del jugador, Piqué no llegó a entrar en el local y se
marchó en el carro de su hermano de la zona. Por los hechos, Piqué está acusado
de una falta de respeto y desobediencia leve a la autoridad. Aunque no es un
delito grave, el jugador deberá responder ante un juez en un próximo juicio de
faltas.
De hecho, esta misma tarde, Piqué, a través de su
cuenta personal en twitter ha pedido disculpas al escribir: “Se ha exagerado
mucho lo que dije pero, en cualquier caso, lo siento, me he equivocado y no
volverá a ocurrir”, ha dicho al saber que lo acontecido había salido a la luz,
cosa que esperaba desde el mismo momento de los hechos dado que numerosas
personas registraron el incidente con sus teléfonos.


No hay comentarios.: