CINCINNATI, Ohio (15 Julio 2015).- Pete Rose volvió
a casa para el Juego de Estrellas y apareció en el lugar en el que aún es
tratado como un rey.
El rey del hit en Grandes Ligas fue votado para ser
uno de los cuatro Jugadores Franquicia de Cincinnati como parte de una
promoción de MLB. Rose y los miembros del Salón de la Fama Johnny Bench, Barry
Larkin y Joe Morgan fueron presentados en el campo del Great American Ball Park
previo al Juego de Estrellas del martes.
Rose, de 74 años, fue el último en aparecer y
provocó los gritos de "¡Pete!, ¡Pete!" por parte de los aficionados.
Siempre es bien recibido en casa. Sin embargo, fue
una mucho más moderada de lo habitual -- el campeón del Derby de Jonrones, Todd
Frazier, recibió una ovación más fuerte, y los abucheos para el cátcher
puertorriqueño de los Cardenales de San Luis, Yadier Molina, fueron más
sonoros.
"Lo único malo es que no tuve turnos al
bate", dijo Rose a la prensa. "Me hubiera gustado tener un par de
turnos. Los aficionados fueron maravillosos. "He tenido esta relación durante 30 años. Los
aficionados son maravillosos".
¿Qué sigue para Rose? No tiene idea.
Rose fue expulsado en 1989 por apostar en juegos de
béisbol y desde hace tiempo ha solicitado su reinstalación, que es un asunto
pendiente. El martes, el comisionado Rob Manfred señaló que aún no tiene
programada una reunión con Rose para hablar al respecto.
Manfred, quien en enero reemplazó a Bud Selig, dijo
que revisa todo el material generado por las múltiples investigaciones sobre
Rose.
"Sinceramente, me sorprendí con la cantidad de
material que hay que revisar", dijo el comisionado. "Estamos viéndolo
nuevamente. Mantengo mi compromiso con la idea de que el señor Rose merece una
oportunidad de decirme, de la forma en que se sienta más cómodo, lo que me
quiera decir al respecto. Estoy seguro que habrá una reunión en persona".
Rose conoció a Manfred por primera vez mientras
esperaba su ingreso al campo.
"Nunca había hablado tanto de alguien a quien
no conociera", dijo Rose.
Rose está en su primera temporada como analista para
la cadena Fox Sports. También realiza frecuentes apariciones públicas,
manteniéndose visible durante su exilio del béisbol.
Su presencia en las festividades del Juego de
Estrellas generó varios momentos delicados. Varias figuras del deporte,
incluyendo el manager de la Liga Nacional, Bruce Bochy, mantuvieron una postura
diplomática cuando se les preguntó sobre Rose.
Apenas la semana pasada, el ex pitcher de Grandes
Ligas, Curt Schilling, expresó su decepción sobre cómo Rose parece ensombrecer
los momentos más grandes del deporte.
Su aparición del martes fue la segunda para Rose en
el Great American. MLB le otorgó permiso de salir al campo el 11 de septiembre
de 2010, en el aniversario 25 de que impusiera la marca de hits con 4.192 en el
viejo Riverfront Stadium.
Su otra aparición notable en un estadio fue en
Atlanta, antes de un juego de Serie Mundial en 1999, cuando fue homenajeado
como parte del Equipo Ideal del Siglo. Durante la ceremonia, la entrevista con
el reportero Jim Gray generó varios momentos incómodos.
Esta vez no hubo preguntas sorpresa para Rose en el
estadio ubicado en Pete Rose Way -- no Johnny Bench Boulevard, no Tony Pérez
Place, no Joe Morgan Street. Es en honor a Rose.
"Todo había estado fantástico y con fuertes
aplausos, pero cuando Pete salió los decibeles aumentaron bastante y era lo que
esperábamos", dijo Larkin. "Johnny decía que estaba contento de que
Pete fuera el último".
Frazier, por su parte, estaba ansioso por ver una
cálida recepción para Rose.
"Será grandioso, conociendo a estos aficionados,
y sabiendo lo leales que son al juego y lo mucho que quieren a Pete Rose",
dijo Frazier, quien el lunes ganó el Derby de Jonrones. "Si quieres pelear
con alguien de Cincinnati, dile que no quieres a Pete Rose. Será como insultar
a su papá".
A pesar de que nunca jugó en el Great American, sus
huellas están en todo el estadio. Varios aficionados asistieron con sus jerseys
de Pete Rose. El Salón de la Fama del equipo, en el edificio contiguo, tiene
una gran exhibición sobre Rose.
Y un jardín de rosas justo a las afueras del estadio
marca el lugar donde cayó el imparable con el que rompió el récord, en el viejo
Riverfront Stadium.
No hay comentarios.: