NUNCIO DICE QUE EL VATICANO NO HA RECIBIDO INVITACIÓN PARA DIÁLOGO EN VENEZUELA

CARACAS (26 Julio 2016).- El nuncio en Venezuela, monseñor Aldo Giordano, aseguró hoy que aunque el Vaticano está "listo" para colaborar en el proceso de diálogo que intenta entablar el Gobierno de Nicolás Maduro con la oposición, hasta el momento no ha recibido una invitación para participar.

"El Vaticano está siempre listo para ayudar cuando es posible, cuando es útil, hasta ahora no tenemos invitación formal de parte del Gobierno o de parte de la oposición para participar, no tenemos noticias hoy puntuales sobre las situaciones, las decisiones del diálogo aquí en Venezuela", dijo Giordano a los periodistas durante un foro sobre la situación venezolana.

Justamente la participación del Vaticano había sido una de las principales exigencias de los opositores para participar en el diálogo convocado por Maduro con el auspicio de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la mediación de un grupo de expresidentes.

Los opositores además reclaman que se precise la fecha para los trámites del referendo revocatorio del jefe de Estado venezolano, una exigencia que el Gobierno ya ha dicho que no está dispuesto a respaldar y que, por el contrario, considera ilegal y fraudulenta.

Al ser consultado sobre la iniciativa de los opositores para tratar de cesar a Maduro de su cargo, Giordano señaló que "el revocatorio es un capítulo de la Constitución de Venezuela, entonces es un capítulo de la política de Venezuela, propio de Venezuela", y que la Iglesia respeta "las constituciones de los países y las políticas de los países".

"La Santa Sede no tiene una tarea política, tiene la tarea de servir a la relación entr

e el Papa, la Santa Sede y el gobierno, y servir la relación entre el Papa,y la Iglesia del país, nuestro interés es el pueblo, nuestro interés es el bien del pueblo, no nos ocupamos de la política", agregó.

Como mediadores para intentar conseguir esas conversaciones entre el Gobierno y la oposición actúan los expresidentes Martín Torrijos (Panamá) y Leonel Fernández (República Dominicana) y el exjefe del Gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero.