El deceso de la señora Reyes se produjo en La Habana
por complicaciones derivadas de quebrantos que padecía hace varios años.
Al momento de su muerte contaba 80 años y se
encontraba ingresada en el hospital Joaquín Albarrán. Le sobreviven Libner
Esther Valdez Díaz y Josué Valdez Díaz.
En una declaración que hizo llegar a los medios a
través del periodista Juan Deláncer, el comandante Gómez Ochoa informó que su
compañera a lo largo de 41 años, pese a sus apremios de salud, tuvo una muerte
apacible.
Dijo que sus restos descansan en el Panteón de
Veteranos del cementerio de Colón.
También, el Héroe Nacional lamentó no haber podido
estar presente en los actos conmemorativos del 61 aniversario de las
expediciones de junio de 1959, debido a las condiciones impuestas por la
pandemia del COVID-19.
Gómez Ochoa, de 90 años, dijo que anhela mucho poder
volver al país que le concedió la nacionalidad,
cuando las circunstancias lo permitan, y donde cada año pasa una
temporada.
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