Tienen categoría de fenómenos políticos, alcanzan trascendencia de pensamientos y doctrinas políticas, el Boschismo y el Peñagomismo?
Tanto Juan Emilio como José Francisco, concebían un Estado–Gobierno ético, democrático, humano. Ambos, en su oportunidad, lideraron reformas constitucionales de carácter evolutivo, a saber muy cercanas o las posibles a sus discursos.
Bosch Gaviño, Balaguer Ricardo y Peña Gómez, gravitaron como lideratos políticos principales en la postdictadura y la postguerra. El presidente Juan Bosch, hubo que repensar un nuevo país, un nuevo sentido de la gobernabilidad después de 31 años caracterizados por el régimen dictatorial. Al presidente Joaquín Balaguer, tocó el rol histórico de gobernar en la postguerra, instante caracterizado por las secuelas derivadas y causales propias de la coyuntura. José Francisco Peña Gómez, hizo de contrapeso y sabia oposición ejerciendo un liderato político y social que trascendió nuestras fronteras.
A salir del Partido Revolucionario Dominicano, el profesor Juan Bosch se esmeró en construir un nuevo Partido fundamentado en una rígida educación y discurso ético-moral. La realidad de hoy describe un Partido de la Liberación Dominicana muy lejos de las enseñanzas y doctrinas del líder fundador.
Aunque José Francisco Peña Gómez lo encaminó dos veces al gobierno, el Partido Revolucionario Dominicano siempre fue un monstruo con los pies de barros. Una cosa dice el estatuto, otra cosa es la práctica y comportamiento políticos. Del PRD histórico no queda ni la sombra. Por ello dialécticamente nace el Partido Revolucionario Moderno, que está llamado a reivindicar el pensamiento y discurso de Peña Gómez.
Si los líderes políticos principales del país provienen de las escuelas de Bosch y Peña, supone un avance y razón para adecentar el ejercicio de la actividad política en la República Dominicana.
Por ELVIN SÁNCHEZ
No hay comentarios.: