No exageró el filósofo y activista político Cornel West, una de las voces más lúcidas y críticas de la cultura estadounidense de este tiempo, al presentar con las palabras citadas al compositor, intérprete y pedagogo Bill Banfield (Detroit, 1961), músico todoterreno que comparte por estos días experiencias con colegas cubanos, y cumple el sueño de conocer, de primera mano, una de las fuentes sonoras imprescindibles para la comprensión de los aportes africanos a las culturas americanas.
Armado de su guitarra, la estancia de Banfield en la
Isla tendrá su punto culminante el próximo sábado 9, a las 10:00 A.M., cuando
protagonice un concierto en la sala Gisela Hernández, del Museo Nacional de la
Música, en compañía de los pianistas Wayman Chin y Krystal Banfield, el
contrabajista Ron Reid y el saxofonista Dwight Andrews, y los cubanos del grupo
Camino de Santiago, que lidera David Faya, el cual será introducido por la
narradora y conferencista Jamie Bernstein, hija del célebre director y
compositor Leonard Bernstein (West Side Story).
Por 15 años, Banfield se desempeñó en el prestigioso
colegio Berklee de Música, en Boston, en el cual dirigió el programa de
Estudios Africanos.
La amplia paleta de su labor autoral comprende 13
sinfonías, ocho óperas, más de 50 canciones y una treintena de partituras para
bandas de jazz, además de conciertos para percusión, trombón, piano y otros
instrumentos solistas con orquesta.
Ha colaborado con prominentes figuras de la escena
jazzística de su país, entre ellas el vocalista Bobby McFerrin, la violinista
Regina Carter y el trombonista Delfeayo Marsalis.
En 2014 emprendió uno de sus más innovadores
proyectos, la fundación y dirección del sello discográfico Jazz Urban, que
privilegia el registro de obras y autores comprometidos con la experimentación
del género.
Entre sus libros destacan Códigos culturales:
aproximación a la filosofía de la música negra y Paisajes en color:
conversaciones con compositores afroestadounidenses.
Por PEDRO DE LA HOZ/Granma
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