Arrancaron los Juegos Paralímpicos en los Campos Elíseos y la Plaza de la Concordia, ante miles de espectadores, con la ayuda de 168 delegaciones deportivas
Una vez más, París se ha transformado en un escenario
vibrante para celebrar el deporte y sus atletas de todo el mundo. Pero, este
miércoles 28 de agosto, como una bendición venida de lo alto, el clima se sumó
a la celebración. Se acabaron las tormentas que cayeron en la inauguración de
los Juegos Olímpicos (OG) el 26 de julio. Bajo un sol radiante y un calor
sofocante se inauguraron los XVII Juegos Paralímpicos de Verano, con la ayuda
de 168 delegaciones deportivas y 500 artistas o intérpretes.
Para estos campeones discapacitados, como para sus homólogos sin discapacidad, la capital ofreció su espléndido marco a un evento que tuvo lugar por primera vez fuera de un estadio, como durante los Juegos Olímpicos. El cielo fue cambiando de color, tiñendo de rosa las fachadas del Arco de Triunfo, de la Asamblea Nacional y del Hôtel de la Marine, y luego se volvió aterciopelado oscuro sobre el inmenso escenario creado alrededor del obelisco de la Concordia.
Esta plaza, donde durante los Juegos Olímpicos se
celebraron las pruebas de BMX, skate, break y baloncesto 3×3, fue completamente
remodelada para albergar el desfile deportivo y el espectáculo diseñado.
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