El Papa León XIV celebra la labor de los empleados del Vaticano
En su discurso dirigido a los empleados del Vaticano y
sus familias, el Papa León XIV compartió sus primeros saludos navideños,
destacando la importancia del trabajo cotidiano y su conexión con la fe
cristiana. El pontífice inició su discurso con un cálido agradecimiento,
estableciendo, una vez con ellos un tono de cercanía y fraternidad. Con este
discurso, el Papa no solo fortaleció el vínculo con quienes sostienen día a día
el funcionamiento del Vaticano, sino que también recordó que cada acción
cotidiana, realizada con amor y dedicación, es una forma de veneración a Dios.
El
Papa reconoce el esfuerzo de los empleados del Vaticano
Durante su intervención, el Papa subrayó que, aunque
no era el momento para hablar de trabajo, deseaba reconocer el esfuerzo y la
dedicación de cada empleado del Vaticano. Estoy aprendiendo a conocer el
Vaticano como un gran mosaico de oficinas y servicios, y poco a poco, dijo, con
la ayuda de Dios, espero poder encontrarme con vosotros visitando los distintos
lugares de trabajo, afirmó.
El Papa centró su mensaje en el significado del
nacimiento de Jesús y en la representación del trabajo en el pesebre:
artesanos, pastores y comerciantes, todos con sus ocupaciones diarias, forman
parte de la escena navideña. León XIV explicó que, así como estos personajes
contribuyen al milagro del nacimiento de Cristo con sus tareas cotidianas, cada
empleado del Vaticano puede dar gloria a Dios a través de su labor diaria: “A
veces se está tan concentrado en las ocupaciones que no se piensa en el Señor o
en la Iglesia, pero el hecho de trabajar con dedicación, buscando dar lo mejor
de sí mismo, incluso – para vosotros los laicos – con amor por vuestra familia,
da gloria al Señor”.
La
sencillez y la humildad valores en la vida diaria
El Papa también resaltó la importancia de la sencillez
y la humildad, valores que deberían guiar no solo la Navidad, sino también la
vida cotidiana de la Iglesia: Queridos hermanos, señaló, aprendamos del
nacimiento de Jesús el estilo de la sencillez y la humildad, y hagamos que este
sea cada vez más el estilo de la Iglesia, en todas sus expresiones.
Finalmente, el Papa León XIV transmitió sus saludos y
bendiciones a los familiares de los trabajadores, especialmente a los enfermos
y ancianos, deseando a todos un santo y alegre Navidad, concluyendo con una
oración compartida: el Padre Nuestro.
Por PATRICIA
YNESTROZA/Vatican News
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