El FMI supervisará junto a Bruselas la aplicación de los ajustes en Italia

El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, junto a la canciller alemana, Angela Merkel. | EL MUNDO
CANNES.- La Comisión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI) supervisarán la aplicación estricta de las medidas de ajuste que el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, detalló la semana pasada en la reunión del Eurogrupo y ayer en la cumbre del G-20.

Italia ha aceptado que ambas instituciones hagan un seguimiento de los ajustes, aunque fuentes del Gobierno lo consideran una especie de "consejo" para poner en marcha estas medidas más que una tutela de su gestión económica.

Italia, de hecho, alega que este tipo de control es una cuestión genérica que los países del G-20 han planteado para el conjunto de la eurozona. Por su parte fuentes gubernamentales españolas aseguran que España no ha pedido que el FMI supervise de manera especial la aplicación de los ajustes y reformas estructurales puestas en marcha. Fuentes comunitarias confirman también que este tipo de control se aplicará sólo a Italia, al menos en lo que respecta al papel que jugará la Comisión Europa.

Tras su encuentro con los líderes de las 20 economías más grandes del mundo, Berlusconi ha aceptado que el FMI también participe en el control que desde el exterior se hará a la aplicación de las medidas económicas que presentó la semana pasada en una extensa carta de 15 folios.

Entre otras, se compromete a reducir la deuda pública de las Administraciones Públicas hasta el 113% del PIB en 2014, así como a introducir una disposición sobre equilibrio presupuestario en la Constitución para mediados de 2012.

Italia también reformará el mercado laboral antes de que acabe este año, modificar las prestaciones de desempleo e indemnizaciones por despido y aumentar la edad de jubilación a 67 para 2026.

En las conclusiones de la cumbre europea de la semana pasada ya se menciona explícitamente que los socios europeos "invitan a la Comisión a que prepare una valoración detallada de estas medidas y supervise su aplicación, y a las autoridades italianas a que faciliten a su debido tiempo toda la información necesaria para realizar dicha valoración".

Fuentes comunitarias niegan que esta medida de supervisión alcance el mismo detalle que en el caso de Grecia, donde una delegación de la Comisión, el FMI y el BCE -la llamada Troika- revisa trimestralmente el grado de cumplimiento del gobierno heleno. "Es un paso más dentro del procedimiento de control para los países con déficit excesivo", matizan.

Pero la participación del FMI pone de relieve la preocupación en el G-20 por la delicada situación de italia, donde la rentabilidad de su deuda pública alcanza ya el 6,18%. De hecho, se espera que en las conclusiones de esta cumbre que se presentarán en unas horas se haga una mención directa a la necesidad de que el gobierno de Berlusconi aplique sin demora todas las medidas anunciadas.

No hay comentarios.: