BEDFORD, Nueva York - La familia Kennedy, tan acostumbrada a funerales públicos, tiene nuevos motivos para estar de luto, luego de que la esposa separada de Robert Kennedy Jr. se ahorcara en su hogar de un suburbio de Nueva York.
Mary Richardson Kennedy, de 52 años, una arquitecta conocida por su trabajo filantrópico y ambiental quien tuvo problemas con el alcohol y las drogas en años recientes, fue hallada muerta en la tarde del miércoles en la propiedad de la familia en Bedford.
La oficina del forense del condado de Westchester dijo ayer luego de realizar la autopsia que Richardson murió por asfixia a causa de ahorcamiento. Una persona conocedora de la investigación dijo que las autoridades han concluido que se trató de un suicidio. La persona habló bajo condición de anonimato y la policía de Bedford ha rehusado contestar preguntas sobre las circunstancias del deceso.
La muerte de Richardson se produjo luego de varios años difíciles para la familia. Su esposo, Robert Kennedy Jr., un prominente abogado ambientalista e hijo del senador Robert F. Kennedy, había solicitado el divorcio en 2010. La pareja se casó en 1994 y tuvo cuatro hijos. El divorcio no llegó a consumarse.
En los meses subsiguientes a la divulgación de la separación de la pareja, Richardson fue arrestada dos veces por policías que sospecharon que estaba guiando intoxicada. Se le suspendió su licencia una vez, pero los cargos por guiar ebria fueron desestimados.
En la mañana de ayer, conocidos y extraños por igual dejaron flores frente a la residencia.
“Creo que toda familia tiene sus tragedias. Pero esto es ya demasiado. Uno tiene que compadecerse de ellos”, dijo Kim O'Connell, de 59 años y residente de Bedford Hills, quien dijo haber conocido a Mary y a Robert mientras trabajaba en el gimnasio al que asistían.
“Creo que simplemente se trataba de una dama. Me desperté esta mañana y quise hacer algo”, dijo la mujer tras dejar un ramo de flores.
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