SANTO DOMINGO.- Por primera
vez en los últimos 30 años la
Policía dominicana incursionó en el campus de la
UASD. Y lo hizo ante un llamado de las
propias autoridades uasdinas ante la imposibilidad de imponer el orden ante
actos delincuenciales de vándalos camuflados de bachilleres.
Setenta de esos individuos
fueron apresados por la
Policía y son investigados en relación a la quema vehículos
en el campus central.
Entre los vehículos
incendiados figura el Antonio Medina, ex dirigente de la Federación Dominicana
de Estudiantes Dominicanos (FED), hoy decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas.
Los mayúsculos desórdenes
auspiciados por esos “bachilleres” tuvieron génesis en la expulsión de once por
el Consejo Universitario.
Conocida la medida de las
autoridades de la UASD
se desató una revuelta en que terminó con varios heridos, la Rectoría destrozada,
cuatro vehículos dañados y por lo menos 60 estudiantes detenidos.
Los hechos se iniciaron
pasadas las 5:00 de la tarde del viernes cuando los estudiantes, descontentos
por la medida, la emprendieron a pedradas y tiros contra el edificio que aloja la Rectoría , acción con la
cual desmontaron numerosas ventanas de cristal e hirieron algunos empleados.
De inmediato la seguridad de
la alta Casa de estudios repelió la agresión utilizando las armas asignadas, lo
que dejó como resultado varios estudiantes heridos.
“Yo me sentí vulnerable, porque estábamos
encerrados aquí, mientras ellos apedreaban el edificio. Aquí estaba la mayoría
de los empleados y no podían retirarse a sus casas”, dijo el rector.
Los soldados fueron
comandados por los generales Juan Brown Pérez y Neivis Luis Pérez Sánchez,
quienes manifestaron que siempre que las autoridades de la UASD requieran el apoyo de la
uniformada, acudirán a poner el orden.
Los expulsados
Son José Rafael Cabrera,
Eduardo Gómez, Rafelito Valenzuela, David Vicente Cabrera, Luis M. Acevedo,
Hilda de los Santos, Roberto Sánchez y Jonny Nicolás López Torres. Asimismo el
Consejo suspendió a Joel Martínez, Raúl Monegro y Luis Antigua, los cuales
pertenecen al Centro de Estudios de San Francisco de Macorís, hasta tanto se
investigue sus casos.
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