NUEVA YORK.- El taxista Kenny Taveras tiene 29 años
y, desde el 2009, vive y trabaja en Nueva York. Llegó a Estados Unidos desde
República Dominicana lleno de sueños y proyectos buscando un mejor futuro.
"Estoy feliz trabajando como taxista, a
pesar de que es duro, sacrificado y
tengo que dedicarle muchas horas al día. Incluso los fines de semana trabajo
hasta 12 horas", nos contó, mientras hacía su tradicional recorrido por
las calles del alto Manhattan.
El hispano relató que el dolor por la separación de
su familia que dejó en la isla es algo con lo que tiene que lidiar todos los
días.
"Tengo mucha familia viviendo acá en Nueva
York, pero mis padres viven en República Dominicana y eso es un dolor que
siempre tengo dentro. Estoy como dividido. Pero por suerte ahora, con todas las
posibilidades en las comunicaciones, los llamo casi todos los días para tener noticias
y escucharlos", dijo el dominicano.
Sobre los proyectos a futuro, Taveras no descarta nada. "Mi gran idea
es tener un negocio de licores, creo que puede ser un muy buen 'business'. Y si
sigo trabajando en los taxis, ¿por qué no?; tener mi propia base. Estoy
trabajando duro para cumplir mis proyectos y sueños".
Por GERARDO ROMO/Edlp
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