RECHAZADO POR LA MAYORÍA DE LAS FAMILIARES DE LAS VÍCTIMAS DE EXPLOSIÓN GASOLINERA EN HAITÍ FUNERAL NACIONAL
Algunas autoridades locales, incluido el delegado departamental
Pierrot Augustin Degaul, y los agentes ejecutivos interinos Patrick Almonor y
Eusaï Lefranc, participaron en el funeral celebrado en un contexto de
indignación y enfado.
La ministra del Interior y Comunidades Territoriales,
Liszt Quitel, representó al gobierno en el funeral. La gran mayoría de los
familiares de las víctimas rehuyeron el funeral criticando la gestión realizada
por los responsables de este expediente.
En presencia de algunos familiares, parientes y amigos
de las víctimas, inconsolables durante la ceremonia, el Arzobispo de
Cap-Haitien, Monseñor Launay Saturné, en su homilía para la ocasión, deploró la
tragedia que asoló la segunda ciudad del país provocando el muerte de 90
personas, según el recuento oficial.
El prelado católico lamentó la miseria y el alto costo
de vida en el país que sería la principal causa de este cataclismo.
Aprovechó para pedir a los distintos organismos
involucrados que tomen las medidas necesarias para que una tragedia de este
tipo nunca vuelva a ocurrir en el país, criticando a raíz de la escasez de
combustible que es en gran parte responsable de la tragedia del 14 de
diciembre.
Cuatro restos de las víctimas quedaron expuestos
durante estos funerales nacionales, a diferencia de los 25 previamente anunciados
por el municipio de Capoise.
Uno de los miembros de la comisión municipal explicó
que el mal estado de los cadáveres no les permitió exhibirlos en la catedral.
“Tuvimos que transportarlos directamente al
cementerio. "
Los participantes del funeral expresaron brevemente su
decepción al final de la ceremonia denunciando el vehículo destinado al convoy
fúnebre.
“Es una humillación tratar así a las víctimas”,
denunciaron los manifestantes, quienes se apoderaron de los féretros para
depositarlos frente a las instalaciones de la delegación del Norte y por las
calles.
“Aprovecharon esta tragedia para enriquecerse”,
corearon los manifestantes denunciando a las autoridades locales.
Según información, se desembolsaron 9.500.000 gourdes
del fondo de emergencia departamental para la organización del funeral.
Este fondo fue administrado por el Ministerio de
Finanzas que contrató a una empresa funeraria para estos funerales.
“El contrato se celebró directamente entre la
funeraria y el Ministerio de Hacienda sin la intervención del Ayuntamiento. El
ayuntamiento no recibió nada por este funeral ”, explica Almonor.
Mientras tanto, hay descontento en las zonas
afectadas.
Por ejemplo, la pareja Lucien Bélonne y Charles
Guylaine, que perdieron siete hijos en la explosión del camión cisterna en
Cap-Haitien, eludieron este funeral, prefiriendo organizar su propia ceremonia
fúnebre, tras la recuperación de dos de los siete cadáveres.
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