PLAZA SAN PABLO FUE DECORADA CON 40 MIL FLORES HOLANDESAS PARA CELEBRAR LA RESURRECCIÓN DE CRISTO
CIUDAD DEL VATICANO (17 Abril 2022).- Dos años después del inicio de la pandemia, Francisco celebró ante unos 100 mil fieles, unidos en la alegría de la Pascua y en el mensaje de paz que trae Jesús resucitado.
Una plaza abarrotada, iluminada por el sol y
acariciada por el viento, una Iglesia que, unida, canta la alegría del
Resucitado. La celebración de la misa de Pascua comenzó con el rito del
"Resurrexit" en la explanada de San Pedro, decorada con 40.000 flores
traídas de Holanda. Los diáconos abren las puertas del icono del Santísimo
Salvador que el Papa inciensa ante 50 mil fieles, que han vuelto tras dos años
de pandemia para celebrar juntos la Resurrección de Cristo. El corazón se
alegra aunque reina la preocupación por la guerra que ensangrienta Ucrania
desde hace más de 50 días. Desde esta plaza, desde esta única voz, se eleva una
oración por la paz.
Quien
cree en Él recibe el perdón
La primera lectura, tomada de los Hechos de los
Apóstoles, recuerda las palabras de Pedro: "Nosotros somos testigos de
todo lo que hizo en la tierra de los judíos y en Jerusalén", para luego
decir que es "juez de vivos y muertos" y que "que todos los que
creen en él reciben, por su nombre, el perdón de los pecados".
"Aspirad a los bienes de arriba, no a los de la tierra", invita la
carta del Apóstol San Pablo a los Colosenses, porque "Cuando aparezca
Cristo, vida vuestra, entonces también vosotros apareceréis gloriosos,
juntamente con él". Tras el canto de la Secuencia Pascual, se proclamó el
Evangelio de Juan en latín y griego, que narra el descubrimiento de la tumba
vacía y el desconcierto de los discípulos por no haber entendido aún la
Escritura, "que iba a resucitar de entre los muertos". El Papa y la
asamblea guardan silencio tras el anuncio de la Palabra de Dios.
Saludo
desde el papamóvil
En la oración de los fieles, en varias lenguas, se
hace un llamamiento a los gobernantes para que busquen el bien común y la
concordia; luego, en ucraniano, se reza por los difuntos, para que participen
en la Pascua eterna. Tras la Eucaristía, la bendición del Papa Francisco
concluye la Misa de Pascua, con el mandato de "ir en paz", una paz
que hoy hay que pedir con insistencia y oración.
Al final de la celebración, Francisco en el papamóvil
saluda a los fieles, deteniéndose para devolver un gesto de afecto a quienes lo
han llamado o saludado agitando un pañuelo. El jeep lleva al Papa por la Via
della Conciliazione, como sucedía desde hace tiempo, en medio de la alegría de
los que se agolpan en la calle. Un recorrido que, tras el Domingo de Ramos, se
repitió y que marca una esperada vuelta a la normalidad, tras el largo
aislamiento por la pandemia.
Por BENEDETTA
CAPELLI/Vatican News
No hay comentarios.: