DESPLOMADO UN EDIFICIO DE CINCO PLANTAS Y 21 VIVIENDAS EN CENTRO DE TERUEL, EN ESPAÑA
El colapso se ha producido sobre las 11 de la mañana
mientras los bomberos apuntalaban el bloque, momento en el que han comprobado
que los daños comprometían la estabilidad de la construcción, por lo que
ordenaron el desalojo inmediato.
También han sido evacuados los bloques colindantes en
busca de posibles fugas de gas o agua. Después de las lluvias torrenciales de
las últimas semanas y de ayer mismo, cuando se registraron 29 litros por metro
cuadrado, los garajes del edificio se anegaron y los vecinos habían alertado de
filtraciones de agua por las paredes, de roturas en paredes maestras y de
mampostería que había perdido la sujeción.
El bloque de la calle de San Francisco, construido en
los años 60, ha colapsado en plena revisión tras detectarse las grietas. La
alcaldesa en funciones de Teruel, Emma Buj, ha contado que a primera hora se
recibió una llamada que alertaba de que el edificio no se encontraba en buenas
condiciones e, “inmediatamente”, se han personado los arquitectos municipales,
la policía y los bomberos, y se ha procedido a desalojar completamente este
inmueble —algunos vecinos ya lo habían dejado tras observar las grietas y
escuchar los crujidos— y los edificios colindantes. “Estábamos aquí; yo misma
me encontraba en el lugar, con el concejal de Urbanismo en funciones, con todos
los servicios municipales, cuando el edificio, que estaba crujiendo, ha
colapsado y se ha venido abajo”, ha explicado a la prensa en plena calle.
Las causas del derrumbe se están investigando, por lo
que la alcaldesa no ha querido dar más detalles, ni comentar las denuncias por
filtraciones de agua que habían hecho algunos vecinos. “Eso se tendrá que
investigar”, ha dicho a la agencia Europa Press. De hecho, esta mañana se
encontraba en el inmueble la empresa encargada del saneamiento del agua,
“precisamente, porque se habían anegado en los bajos”. No obstante, Buj ha
aclarado que a raíz de las últimas lluvias las inundaciones de los subterráneos
se han producido “en muchos edificios de Teruel y no han colapsado, por tanto,
lo que habrá que hacer es investigar qué es lo que ha sucedido”. La Diputación
de Teruel ha informado de que una unidad canina va a inspeccionar las ruinas
del edificio para cerciorarse de que no hay ninguna persona atrapada entre los
escombros.
“En una hora hemos pasado de estar sentados a no tener
casa”. Así explica Javier Carbó a la agencia Efe la rapidez con que se ha
venido abajo el edificio. Las veinte familias que lo habitan han salvado sus vidas
al intuir la desgracia, avisarse unos a otros y evacuar el edificio
prácticamente antes de que llegaran los bomberos y las fuerzas de seguridad.
“Hemos salido porque nos hemos percatado”, ha relatado Carbó, que afirma que
los residentes se han quedado “con lo puesto”.
Aunque por el momento se desconocen las causas del
derrumbe, Carbó y otros tres vecinos estuvieron hasta las 23.00 horas de la
pasada noche tratando de achicar el agua que “salía por la pared” en el garaje
para poder acceder a sus vehículos. Y es que ayer en Teruel llovió mucho, más
de 29 litros por metro cuadrado que se han sumado a las precipitaciones que no
han dejado de caer en toda la semana. Uno de los vecinos que estuvo por la
noche le comentó a Carbó que vio un pilar rajado y otros dos que se habían
movido, y que había piedras del muro que ya no tenían la tierra de fijación.
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