CANCILLER ROBERTO ÁLVAREZ SUSPENDE AL CÓNSUL EN BARCELONA CÉSAR BALTAZAR MÉNDEZ POR CHOCAR PASADO DE ALCOHOL AUTOMÓVIL CUERPO CONSULAR CON OTRO
Asimismo, indica que este se encontraba en proceso de
transición para entrega de la misión, ya que semanas atrás fue nombrado en el
cargo el señor Antonio Gómez, mediante el Decreto 163-23, en cumplimiento de
procesos de alternancia.
La Cancillería también señaló que se encuentra a la
espera de los informes oficiales de la Cancillería Española y la Embajada
Dominicana en España.
El cuatro de julio, la Guardia Urbana de Hospitalet de
Llobregat había denunciado a César Baltazar Méndez Pérez, el cónsul general de
la República Dominicana en Barcelona, por haber tenido un accidente, haber
intentado escapar del lugar de los hechos, haberse negado a hacer las pruebas
de alcoholemia y haberse resistido a la policía. Según ha podido saber
ElCaso.com, los hechos se produjeron la noche de domingo a lunes cuando el
vehículo que conducía al cónsul, con la matrícula verde de "cuerpo
consular", impactó contra otro coche y provocó un accidente, por suerte, sin
heridos graves.
Bebido
conduciendo el coche del cuerpo consular
César Baltazar Méndez, abogado de profesión, y miembro
del cuerpo diplomático de la República Dominicana en España, con
responsabilidades en la zona de Catalunya y Andorra, intentó escapar del lugar
del accidente y tuvieron que ser los ocupantes del otro vehículo los que
pudieron pararlo poniendo su coche delante del cónsul. Cuando una patrulla de
la Guardia Urbana llegó al lugar de los hechos, el hombre se negó a hacer las
pruebas de alcoholemia -presentaba signos de ir bajo los efectos del alcohol,
según consta en el atestado- y también se resistió a los agentes, enfrentándose
a la policía y asegurando que disfrutaba de inmunidad.
Sin embargo, aunque los agentes creían que tenía que
ser detenido, el hombre se identificó como miembro del consulado en Barcelona y
los agentes, en virtud del acuerdo de la convención de Viena, que otorga
inmunidad diplomática a este tipo de cargos extranjeros, no lo detuvieron.
Según consta en este tratado, todavía vigente, los diplomáticos no pueden ser
arrestados si no es por delitos muy graves y, al mismo tiempo, tienen un trato
especial a la hora de tener que comparecer y declarar ante las autoridades
judiciales.
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