Un fantasma, que ha vivido por décadas en esa prestigiosa mansión haciendo travesuras, viendo ascender y descender a varios presidentes por sus escalinatas, una veces sonrientes y en otras, algo tristes y cabizbajos.
Un fantasma muy peculiar, atrevido y malicioso, su pasatiempo favorito es mal aconsejar, a quienes llegan al poder para que olviden todo cuanto prometieron a la población si recibían el beneficio de su voto.
Ese malsano personaje, siempre vestido de blanco, se saborea tal comiera un delicioso manjar cuando el pueblo formula reclamos al presidente de turno, porque es una maravillosa oportunidad para sus propósitos, y que aprovecha, mientras el mandatario duerme, susurrándole, al oído, "no hagas caso, aquí la gente vive bien, todo eso que te piden, es tan solo por mortificarte y hacer de tu estadía en esta amansionada casa una pesadilla."
Es entonces, cuando el mandatario cambia ligeramente de posición en la cama, lo que provoca que el fantasma, haga una leve pausa esperando que el ejecutivo retome nuevamente la tranquilidad del sueño.
Cuando sucede lo esperado, se frota maliciosamente sus manos y continúa diciéndole,"pues, como te decía, tu gobiernas un país, en que casi todo está resuelto.
"Aquí no se puede hablar de desempleo, ni de bajos salarios, puesto que el salario mínimo supera tres veces el costo de la canasta familiar, lo que permite que la gente ahorre el 50% de lo que percibe."
"De la salud ni se diga, los hospitales funcionan a las mil maravillas, tanto así, que hasta se atienden miles de parturientas haitianas, no importa su estatus migratorio, además los médicos ofrecen un eficiente servicio las 24 horas del día." No te preocupes te digo, llévate de mí, que soy tu amigo"
Es más, continúa diciendo el fantasma, "a ti te envidian y por eso te atacan tanto y dicen que tú no estás gobernando bien," no hagas caso, observa, que en este país, no hay un solo niño, sin aulas donde estudiar, y sabes bien, que nuestro sistema educativo es un modelo a seguir en todo el mundo.
"En el campo no falta de nada y por eso la gente de la ciudad se está mudando para allá, además, aquí se está produciendo de todo y ya no tenemos que importar de nada, y los mercados están abarrotados de comida y casi todo regalado.
La delincuencia está en su mínima expresión, de tal manera que casi todo el mundo está quitando las rejas y verjas de sus viviendas, y se acuestan con las puertas abiertas, sin ningún tipo de preocupación, ya no hay temor, ni miedo.
En lo económico tu gobierno va, viento en popa y a toda vela, y como bien tu dices, ahora rinden los cuartos, y gracias a Dios, los préstamos fluyen con mucha facilidad, el turismo con cifras récords todos los meses, y los corruptos algunos presos, otros, esperando su turno.
Mira si yo no fuera un fantasma, y estuviera en tu lugar, tomaría las cosas con calma y no preocupara mucho, pues, la gente como quiera habla, te lo digo yo, que llevo muchos años aconsejando a los que como tú han llegado a este Palacio, "confía en mí, y ya verás."
!Ay me voy que ya casi amanece y tu sabes que la luz del sol me hace mucho daño. "Ah por cierto, yo que tu, me busco cuatro más y después hablamos, llévate de mí, que soy tu amigo."
Por LEONARDO CABRERA DIAZ
No hay comentarios.: