Dios no nos quiere sólo santos, nos quiere "santos inteligentes": Papa Francisco


CIUDAD DEL VATICANO (20 Marzo 2024).- 
"En un mundo dominado por las apariencias, por los pensamientos superficiales, por la banalidad tanto del bien como del mal, la antigua lección de la prudencia merece ser recuperada". Lo dijo el Papa en su catequesis durante la audiencia general en la Plaza de San Pedro reflexionando sobre la prudencia y continuando la serie de catequesis.

La prudencia, junto con la justicia, la fortaleza y la templanza, constituyen las virtudes que se definen "cardinales". Y a esta virtud ha estado dedicada la catequesis de la audiencia general de hoy en la Plaza de San Pedro. El Papa saludó a los fieles y peregrinos y dijo que también esta vez, debido a su dificultad con la voz, será el padre rosminiano Pierluigi Giroli, de la Secretaría de Estado, quien dé lectura al texto preparado.

Las virtudes cardinales, explicó el Papa, no son "prerrogativa exclusiva" de los cristianos, porque ya eran patrimonio de la sabiduría de los antiguos, en particular de los filósofos griegos. Jesús en los Evangelios habla de prudencia y exhorta repetidamente a sus seguidores a ser prudentes. "En un mundo dominado por las apariencias, por los pensamientos superficiales, por la banalidad tanto del bien como del mal -observó Francisco-, la antigua lección de la prudencia merece ser recuperada".

Ser prudente no significa ser temeroso

Es importante, sin embargo, aclarar el significado de la prudencia, afirmó el Papa. Sería un error, por ejemplo, creer que es la característica "de una persona temerosa", siempre titubeante ante la acción que debe emprender. “No es tampoco solamente la cautela". Y continuó:  Conceder la primacía a la prudencia significa que la acción del ser humano está en manos de su inteligencia y de su libertad. La persona prudente es creativa: razona, evalúa, trata de comprender la complejidad de la realidad. Y no se deja llevar por las emociones, la pereza, las presiones, las ilusiones. 


Prudente es quien sabe elegir 

Para Santo Tomás, la prudencia es "la capacidad de gobernar las acciones para dirigirlas hacia el bien", recordó Francisco, y subrayó que "prudente es quien sabe elegir" y que en la vida concreta esto no siempre es fácil, a menudo de hecho "nos sentimos inseguros y no se deja aconsejar y, con amplitud de miras y libertad interior, elige qué camino tomar.



Por ADRIANA MASOTI/Vatican News 


No hay comentarios.: