Un Momento-Garantía en la permanencia

Las empresas que realmente perduran no son solo aquellas que logran ganancias o expanden su mercado. Son, sobre todo, las que permanecen fieles a los principios que proclamaron desde su origen. 

En un mundo cambiante, donde las modas y las estrategias se transforman constantemente, los valores auténticos se convierten en el ancla que sostiene a toda organización. Entre ellos, la solidaridad no puede faltar.

Una empresa solidaria no ve a las personas como simples números. Las ve como protagonistas del bien común. Quien practica la solidaridad en su entorno laboral, con sus clientes y con la sociedad, construye una base sólida que resiste toda crisis. La coherencia entre lo que se dice y lo que se vive es lo que hace realmente grande a cualquier institución.

Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.

Por MONSEÑOR RAMÓN DE LA ROSA Y CARPIO