La cantante Janet Jackson ha abrazado la religión de
su marido, el millonario Wissam Al Mana -con quien se casó en 2012- y se está
tomando su conversión al Islam tan en serio que incluso ha modificado el
vestuario de su gira de conciertos y sus movimientos de baile sobre el
escenario para que sean más recatados.
"Siente que ha encontrado su lugar
gracias a su nueva religión y así se lo ha hecho saber a los miembros de su
familia, que respetan completamente su decisión. Ha pasado mucho tiempo
estudiando la religión y a sus seguidores.
Los días de coreografías
provocativas y canciones de contenido sexual se han acabado para ella",
explica una fuente al periódico The Sun.Ahora Janet termina todos sus
conciertos despidiéndose con la frase "Inshallah", que significa
"Si Dios quiere", según informa el mismo medio.
Desgraciadamente sus
seguidores tendrán que esperar para comprobar cómo ha influido la conversión de
Janet en sus actuaciones en directo, ya que la cantante ha cancelado su
concierto en el iHeartRadio Music Festival de este fin de semana -en el que
debía actuar junto a Kanye West, The Killers, Coldplay, Kenny Chesney, Blake
Shelton, The Weeknd, Duran Duran, Lil Wayne, David Guetta y Disclosure- debido
a un problema auditivo que le impide volar, según reveló Las Vegas
Review-Journal.
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