LA HABANA (22 Marzo 2016).- El presidente Barack
Obama que agota sus últimos meses al timón de la nación más poderosa y
observada del mundo se convirtió en el segundo de su estirpe en viajar a la
isla del Caribe en toda la historia, y el único en acceder al más emblemático
de los estadios de béisbol cubanos: El Estadio Latinoamericano.
Allí, en el número 312 de la calle Zequeira, en el
corazón de una barriada popular, no muy lejos del centro del poder, se erige
“El coloso del Cerro”, un espacio que, como el Yankee Stadium, de Nueva York, o
el Santiago Bernabeu, de Madrid, ha sido testigo de acontecimientos deportivos,
además de haber recibido a aficionados de todos los tipos y personalidades de
todas las alcurnias.
Obama llegó al Estadio Latinoamericano en compañía
del presidente cubano Raúl Castro para presenciar el juego entre el equipo de
Grandes Ligas, Rays de Tampa Bay y la Selección de Cuba.
El duelo de exhibición arrancó en punto de las dos
de la tarde.
Obama y su familia estuvieron presentes ver el
partido, siendo el primer mandatario estadounidense que visita Cuba desde que
lo hizo Calvin Coolidge hace 88 años.
Este juego amistoso representa un paso importante
para aliviar las tensiones entre los Estados Unidos y Cuba, pero también habrá
mucho béisbol de calidad para disfrutar. Este es, después de todo, el país que
le ha dado al béisbol de Grandes Ligas figuras como Luis Tiant, Yasiel Puig y
muchos otros.
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