JÓVENES DOMINICANOS ABORDANDO LA VIOLENCIA DE GÉNERO

SANTO DOMINGO, República Dominicana (7 Febrero 2021).- Luisanny Cordero creció en una familia humilde en Villa Riva, un pueblo de la provincia de Duarte, ubicado al norte de la República Dominicana

A veces, mientras su mamá trabajaba, Luisanny tenía que cuidar de su hermana y hacerse cargo de la casa, todo mientras estudiaba. Ahora, una estudiante de medicina de 21 años, es voluntaria en las horas que no estudia para una causa cercana a su corazón: llegar a los jóvenes que están en riesgo de participar en actividades ilícitas y promover una vida sana y segura.

En República Dominicana, alrededor del 20 por ciento de las mujeres alrededor de la edad de Luisanny han tenido al menos un hijo antes de los 18 años, lo que convierte a República Dominicana en uno de los países con las tasas más altas de embarazo adolescente en América Latina. Los altos niveles de feminicidio, agresión sexual y violencia intrafamiliar afectan a las mujeres jóvenes en todo el país. Los jóvenes del país representaron más del 40 por ciento de las víctimas de homicidio en 2018.

Muchos recurren al crimen, la violencia, al matrimonio precoz o a las drogas como una salida a las situaciones difíciles que enfrentan. Luisanny no. Desde el principio se dio cuenta de que podía ayudar a otros jóvenes a cambiar de opinión sobre ciertos temas después de participar en los talleres de la iniciativa Alerta Joven de USAID y en el desarrollo de su red de jóvenes.

El ex director de la USAID en República Dominicana, el Sr. Arthur Brown, habla con miembros de la Red Alerta Joven en Guachupita sobre sus problemas y las situaciones que enfrentan a diario.

Las redes son grupos compuestos por jóvenes de entre 11 y 24 años que se identifican durante las actividades que lleva a cabo la iniciativa de la USAID. La mayoría son de comunidades vulnerables, y participar en las redes les ayuda a crear oportunidades para construir un futuro mejor y romper el ciclo del crimen y la violencia.

Iniciado en 2012, el proyecto Alerta Joven al día de hoy, inicia cada Red de Jóvenes con un grupo de 25 jóvenes que reciben capacitación sobre leyes que afectan a la juventud, liderazgo, estructura de las redes, mediación de conflictos y habilidades para la vida. Cada una de las 11 redes está compuesta por hombres y mujeres jóvenes que viven en comunidades de alto riesgo, miembros de la comunidad LGBTI+, personas con discapacidad, personas en conflicto con la ley, autores o víctimas anteriores de violencia, personas que anteriormente eran usuarios de sustancias ilícitas y personas sin documentación.

En 2019, Luisanny fue invitada por el Ministerio de la Juventud a una reunión en la Universidad Católica Nordestana. “Desde entonces he seguido participando en las capacitaciones que se imparten sobre cultura de paz, habilidades para la vida, mediación de conflictos, etc.”, explica.

Ella conoció las Redes de Jóvenes y su trabajo en la prevención del crimen y la violencia en las comunidades donde trabajan, y poco después se unió a la red de San Francisco de Macorís.

A través de su curiosidad y fuerza de voluntad, y con la ayuda de otros hombres y mujeres jóvenes de la red, Luisanny se ha acercado a los jóvenes de la provincia de Duarte. “Sin duda, el impacto de nuestras acciones ha sido excelente. A través de la red, hemos cambiado la vida de muchos jóvenes, cambiado su forma de pensar y les hemos ayudado a comprender su papel en la resolución de los problemas de sus comunidades. También hemos podido replicar los talleres en la provincia de Duarte”, dijo.

Superando obstáculos

A finales de febrero de 2020, los rumores sobre las infecciones por la COVID-19 comenzaron a circular por la República Dominicana. El primer caso se confirmó poco después, y el país inició su proceso de toque de queda y cuarentena a mediados de marzo. Las redes de jóvenes en riesgo se adaptaron rápidamente.

Los líderes juveniles tuvieron que cambiar la forma en que llegan a las personas para continuar con su trabajo. Luisanny dice: “Hemos podido seguir impactando a las personas a través de talleres en redes sociales y plataformas digitales. El uso de las redes sociales nos ha ayudado a mejorar nuestro alcance a los jóvenes fuera de la red, para motivarlos a unirse y participar”.

Las redes también han mantenido reuniones en línea. La Red de Jóvenes de Santo Domingo Oeste, por ejemplo, realizó una reunión virtual con el exdirector de la Policía Nacional, general Ney Aldrin Bautista, para brindar una actualización sobre la situación en medio de la pandemia de la COVID-19 y actualizarlo sobre el estado de su Plan de Prevención de Crimen y la Violencia. 

Luisanny y, su compañero, Luis durante la presentación del Plan de Prevención de Crimen y Violencia de la ciudad de San Francisco de Macorís.

El plan, que se presentó en enero de 2020, resalta el importante papel que tienen los jóvenes en la prevención del crimen y la violencia, y en la promoción de la paz en sus comunidades. Los jóvenes también hablaron sobre los talleres de mediación de conflictos que organizaron y sobre las donaciones que recolectaron, para colaborar durante la pandemia, para las personas en los barrios de Manoguayabo, Buenos Aires y El Café de Herrera, todos ubicados en la ciudad de Santo Domingo.

Otro ejemplo, esta vez en San Francisco de Macorís, la provincia natal de Luisanny, es la conferencia sobre los derechos de las mujeres que realizó la Red de Jóvenes Alerta Joven, a la que asistieron más de 140 jóvenes en el Día Internacional de la Mujer. Esta actividad, junto a otras realizadas por otras redes del país, contribuyó a promover el empoderamiento femenino, la igualdad y la participación de las mujeres en todos los ámbitos de la sociedad. “A pesar de los avances, aún existen obstáculos que limitan el empoderamiento de las mujeres. El empoderamiento de todas las mujeres y niñas de nuestro país es una herramienta importante para el cambio y la igualdad de género. Empoderar a las mujeres es clave para el crecimiento y el desarrollo de cualquier país. Les digo mujeres que ahora es el momento de empoderarse y reclamar sus derechos en todos los ámbitos”, dice Luisanny.

Respecto a la violencia de género, Luisanny dice que “la violencia de género constituye una ofensa a la integridad, dignidad y libertad en cualquier ámbito que se produzca. No debemos callarnos ante ningún acto de violencia, pues nada justifica la violencia. Debemos denunciarlo y ser parte de la solución”.

Parte de la Red de Jóvenes Alerta Joven en Guachupita. Foto por: Entrena

Sobre Alerta Joven

Con una inversión de US $25 millones, el Proyecto Alerta Joven de la USAID ha impactado las vidas de más de 145,000 jóvenes en más de 500 vecindarios vulnerables en la República Dominicana.


Fuente: DO.EMBASSY.GOV

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