OBISPOS HAITIANOS NIEGAN IGLESIA CATÓLICA TRAFIQUE CON ARMAS Y AFIRMA PROGRAMAS RADIALES CREAN FALSAS NOTICIAS SOBRE SECUESTROS
PUERTO PRÍNCIPE, Haití (11 Septiembre 2022).- Los obispos de la Iglesia Católica haitiana condenaron los programas radiales que crean falsas noticias y asustan a la población sobre secuestros y demás hechos de violencia en zonas específicas del país.
La Conferencia del Episcopado de Haití desligó a la
iglesia del tráfico de armas como denuncian locutores y periodistas de esta
nación.
Sin embargo, la Iglesia Católica agradeció la labor de
los comunicadores que, sin alarmar, informan a la población sobre los
acontecimientos que suceden día a día en el país.
La opinión de los obispos haitianos está contenida en
una carta que dirigieron al gobierno de su país, solicitando la implementación
de políticas públicas que ayuden a mejorar la situación de pobreza e impedir el
alto nivel de inseguridad que reina en Haití.
“Mientras agradecemos a quienes capacitan e informan a
la población, denunciamos con todas nuestras fuerzas a algunos locutores de
radio que citan el nombre de la Iglesia Católica en el nefasto acto del tráfico
de armas. Algunos de ellos incluso
amenazan con hacer cosas malas en los edificios de nuestras iglesias, en
nuestros sacerdotes y monjas, en nuestros colaboradores y en nuestras
instituciones. La Iglesia Católica no
está en el comercio de armas. Que la
acusación haga su trabajo. Dejen de sembrar confusión y confusión en la mente
de la población. La difamación y la calumnia son pecados graves. Empañan y
matan la imagen y la reputación de las personas”, expresa la misiva de los
obispos.
Sigue diciendo que “la misión de la Iglesia Católica
en Haití es servir a todas las personas en los cuatro rincones del país, tanto
en las ciudades como en las zonas más remotas. Estamos comprometidos no solo en
la labor de anunciar la Buena Nueva y evangelizar a las personas, sino también
en el campo de la educación, en el campo de la salud, en la promoción de la
dignidad y los derechos humanos, en el desarrollo social y en toda clase de
buenas obras de caridad, ayudar al pueblo haitiano dejándolos robar su
esperanza en medio de la desesperación y la angustia.”
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