En Cuba las planchas de zinc de la casa de Eliécer se movían “como una maraca”, pero sobrevivió a Melissa
LA HABANA (30 Agosto 2025).- El Gobierno contiene la respiración ante las poblaciones que siguen incomunicadas 24 horas después del paso del huracán Melissa. Hasta el momento no se ha reportado ningún fallecido, pero Miguel Díaz-Canel, que acusó anoche de “carroñeros” a quienes se preguntan si hay víctimas mortales, no cierra la puerta a esa posibilidad —"puede haber algún fallecido y lo vamos a informar con toda honestidad"— y se ha despachado con una diatriba contra los que "estén pensando o buscando en el dolor del pueblo el argumento para tratar de desmoralizar, para tratar de desunir, para tratar de desacreditar lo que ha hecho este país con su heroico pueblo.
El mandatario cubano estuvo al frente de un encuentro
del Consejo de Defensa Nacional, emitido en el programa Mesa Redonda, en el que
se cuantificaron los daños materiales. Los testimonios recogidos en el oriente
de la Isla eran estremecedores, como el de Eliécer, de 43 años, y entrevistado
por la agencia española EFE, a la que dijo haberse dado por muerto varias veces
cuando veía moverse “como una maraca” las planchas de zinc de su casa, en
Guamá. “La casa se quiso estremecer y yo dije: ‘Bueno, Señor, pon tu mano
poderosa. Tú sabes lo que tú haces’. Si me muero, al menos muero solo”, contó.
Su compañía eran su gato y su perra, ahogada cuando la altura del agua superó
el metro.
Su esposa estaba entre los más de 735.000 evacuados –a
Santiago en este caso–, pero él, afirma, “subestimó el ciclón”. El corresponsal
de EFE, que pudo llegar hasta la zona, habla de un panorama devastador, lleno
de árboles tirados por la carretera y la gran oscuridad que se cernía anoche
por la falta de electricidad, que complicaba, al tiempo, la reconexión de los
cientos de miles de personas que están sin telefonía en la zona afectada por el
meteoro.
“Si me muero, al menos muero solo”, contó. Su compañía
eran su gato y su perra, ahogada cuando la altura del agua superó el metro
En algunos casos, los tejados han volado, en otros, lo
hizo la casa entera. Es la dura situación de Vilma Cabrera cabe en la segunda
categoría de los casos, cuya mísera vivienda de llega y pon –todo su
patrimonio, ubicado en el monte– quedó aplastada por un platanero en medio del
lodo que la rodeó. “Me subió la presión por la madrugada”, afirma. Su vivienda
aún no se había recuperado del paso de Sandy en 2012, y ahora, esto. El resto
de sus vecinos se encuentran en la misma situación.
Extraña poco, cuando se sabe que el Santuario Nacional
de la Virgen de la Caridad del Cobre, un edificio más robusto y cuidado que las
precarias casitas de la zona, ha quedado “muy dañado” y necesita ayuda, según
dijo Rogelio Dean Puerta, rector y párroco del santuario. El religioso, que
mencionó –sin detalles– el fallecimiento de una persona mayor en la zona en una
nota hecha pública ayer, no ha vuelto a hablar de víctimas, ni a la prensa
oficial ni a la extranjera, con la que ha contactado, ya sea porque la muerte
no estaba vinculada al evento o por cualquier otra razón.
La iglesia retomará la actividad religiosa, dijo
esperanzado, aunque el meteoro “dañó la mitad de los vitrales de la basílica, la
carpintería, arrancó puertas y ventanas,…. Ha sido una noche de mucho dolor y
mucha tensión. El huracán Melissa azotó el poblado de El Cobre con una fuerza
increíble. Dicen los mayores que nunca antes habían visto algo así”, describió.
El municipio quedó, según sus palabras “devastado, prácticamente solo quedaron
sin daños las casas con techos de mampostería”. No obstante, los equipos de
rescate pudieron llegar finalmente en la tarde de ayer y llevaron a los vecinos
a albergues.
En términos generales, el huracán dejó unos 400
milímetros de agua en seis localidades y 72 con más de 100. Las olas alcanzaron
en los peores momentos los seis metros y los vientos fueron devastadores. En su
salida hacia Bahamas, Melissa aún está dejando lluvias, pero las condiciones
irán mejorando a lo largo del día, afirmó el presidente del Instituto de Meteorología,
Celso Pazos Alberdi
Las inundaciones han sido severas en Granma, donde, en
palabras de la primera secretaria del Partido Comunista, Yudelkis Ortiz, “todos
los ríos están idos de su cauce”. Hay más de 126.000 personas evacuadas y se
tuvo que rescatar a una cincuentena de atrapados. Lo peor ha ido a parar a
Bartolomé Masó, Guisa, Yara, Buey Arriba, Campechuela, Niquero y Bayamo, pero
hay hasta 13 municipios más con daños.
Beatriz Jhonson Urrutia, presidenta del Consejo de
Defensa Provincial de Santiago de Cuba, hizo mención a los 17 atrapados en El
Cobre a los que un médico dio refugio, todos ellos a salvo finalmente. Palma
Soriano, San Luis, Guamá y la ciudad cabecera son las poblaciones más
afectadas, aunque hay sectores económicos dañados seriamente, entre ellos el
café y la yuca, así como el turismo, que ha salvado las iniciales afectaciones
del aeropuerto Antonio Maceo (que ya realiza operaciones), pero sufre los
efectos en infraestructuras hoteleras, como el Gran Piedra.
Sobre Holguín, que tuvo que proteger a 275.572
personas, más de la mitad en viviendas de familiares, y 1.900 turistas, cayeron
109 millones de metros cúbicos de agua en ocho horas de lluvias. Un récord para
la provincia, dijo el primer secretario del Partido, Joel Queipo Ruiz. En Cueto
hay más de 30 viviendas completamente sumergidas, aunque las familias habían
sido evacuadas.
Por último, Guantánamo, que tuvo un 34% de la
población protegida (152.180 personas) , sufrió la crecida de los embalses en
un 85% en tan solo 12 horas. El café y las viandas, junto con los problemas en
las telecomunicaciones y, por supuesto, las viviendas, son por ahora los más
afectados. Mientras, Las Tunas se libró de lo peor, y aunque algunas viviendas
tuvieron problemas parciales, como algunos cultivos (plátano y maíz), las
lluvias casi han supuesto un alivio, llenando presas vacías por la sequía.
El ministro de Energía y Minas, Vicente de la O Levy,
compareció para asegurar que no hubo daños en las termoeléctricas de la zona
–Antonio Maceo, Renté, en Santiago de Cuba, y Lidio Ramón, Felton, en Holguín–
y que ambas se reconectaron. No obstante, 3,5 millones de personas se quedaron
sin luz, amén de las que tuvieron apagones de muchas horas. El funcionario se
felicitó del resultado de proteger los paneles solares, ya que, afirma, la
afectación ha sido mínima (cuatro en total quedaron dañados en Las Tunas).
No obstante, 3,5 millones de personas se quedaron sin
luz, amén de las que tuvieron apagones de muchas horas.
Otras infraestructuras afectadas fueron las líneas de
Etecsa, tanto fijas como móviles como la fibra óptica, y se tardará días en
reparar la infraestructura, sobre la que cayeron ramas y árboles, así como
postes y torres. En total, el 75% de los habitantes del oriente de Cuba están
sin conexión. Hospitales, centros educativos y carreteras, también están
dañados.
El programa se extendió durante largos minutos más en
los que se abordó la recuperación, incluyendo en sectores como el educativo,
que aún no tiene un calendario para retomar las clases. Se tardarán muchos días
en valorar los daños y empezar a preparar un programa de respuesta del que
muchos desconfían, ya que han pasado 13 años esperando por las ayudas después
del paso de Sandy, como lo hizo la entrevistada por EFE, Vilma Cabrera, que
vuelve a la casilla de inicio sin haber salido apenas de ella.
No obstante, hubo mucho más programa aún para la
épica. Con la satisfacción de no tener hasta el momento fallecidos que
lamentar, se mezcló la votación de la Asamblea General de la ONU sobre la
resolución contra el embargo, que volvió a vencer por 165 votos a favor, 12
abstenciones y siete en contra, una amarga victoria para el régimen, que pese a
contar con una abrumadora mayoría favorable a su petición, cosechó su peor
resultado histórico.
“Todos saben, además, cómo se obtuvieron algunos de
esos votos, porque siempre hay sumisos, entusiastas, como esos que prometen
hacer su país grande de nuevo a imagen y semejanza del dios al que ya han
elegido servir y sabemos bien de quién estamos hablando. Están también aquellos
que se encuentran bajo el peso de las necesidades económicas que escogieron
abstenerse”, consideró Díaz-Canel. El mandatario hizo, posteriormente, un
larguísimo discurso con agradecimientos a los funcionarios implicados en la
Defensa Civil y los ministros. Y remató, cómo no, citando a “Fidel y Raúl,
creadores, constructores y defensores de la Revolución que nos une y
enorgullece”.


No hay comentarios.: