Sabina sufre un ataque de miedo escénico en Madrid: 'Me ha dado un Pastora Soler, lo siento'

MADRID (13 Diciembre 2014).- Sorpresa mayúscula en el esperado regreso a los escenarios de Joaquín Sabina. Con todo el aforo completo, tras agotarse las 14.000 entradas puestas a la venta en apenas una hora, la expectación era máxima en el Palacio de Deportes de la Comunidad de Madrid, pero el cantante se ha visto superado por la tensión y no ha podido finalizar el concierto: "Me ha dado un Pastora Soler", ha asegurado consternado después de cinco años sin pisar un escenario en la capital.

El cantante comenzó su actuación lleno de energía, con muy buena actitud y con muy buena voz, como no se le recordaba en sus últimas apariciones. A los 40 minutos se iniciaron los problemas para Sabina que dejó cantando a Jaime Asua, colaborador suyo, tras el que ha salido a cantar Pancho Varona en solitario.

Cuando ha vuelto a salir, Sabina ha dicho que había sufrido un "Pastora Soler". Desde ese momento ha cantado leyendo y sentado en un taburete.

Sabina se refería así a la confesión reciente de la cantante sobre el miedo escénico que la asalta cada vez que tiene que enfrentarse al público y que le ha obligado a retirarse, al menos temporalmente. El cantante ha sufrido esta misma experiencia esta noche y ha tenido que marcharse ante la conmoción de sus fans."Hoy, por exceso de ganas de estar bien delante de mi gente de Madrid, me acaba de pasar llegando a cosas feas un Pastora Soler".

El concierto ha durado poco más de hora y media. Y ha hecho esfuerzos por continuar, pero tras salir al escenario por segunda vez; después de ausentarse unos minutos (mientras cantaban Jaime y Pancho) tenía otra cara. Estaba pálido y serio; nada que ver con cómo ha empezado. El público ha tenido reacciones diversas. Desde los que gritaban 'tongo; tongo' hasta los que pedían comprensión. Pero todos se preguntaban qué pasará el próximo martes.
La última canción que ha tocado ha sido 'y nos dieron las 10', tras la cual ha dicho: 'esta va a ser la última canción, no va a haber más. No me encuentro nada bien. Lo siento'. Al acabar se ha levantado y ha bajado llorando del escenario. Sus músicos han ido tras él. Uno de ellos, con falda escocesa, ha abandonado pidiendo perdón al público. La próxima cita con el público madrileño es el martes 16.




Por ISABEL HERNÁNDEZ LANTIGUA/El Mundo

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