UCRANIANA ANASTASIA KULINICH CAMPEON MUNDIAL DE BOXEO: LLORÉ EN PODIUM PORQUE ESTABA ENOJADA POR LA GUERRA
"KP en Ucrania" habló con Anastasia Kulinich, y ella nos contó todo el difícil camino hacia la codiciada medalla de la más alta calidad.
Fui a la sección para inflar una hermosa prensa.
Anastasia Kulinich, de 26 años, proviene de la ciudad de Malyn en el óblast de Zhytomyr, a 100 km de Kyiv. La niña fue criada por su madre Angela Danylchenko. Nastya se graduó de la escuela de liceo local No. 1 con una medalla de oro. El primer año estudió en el liceo en una clase con un sesgo matemático, luego cambió a una clase de historia legal. Paralelamente, del 2º al 7º grado, fue a una escuela de música, donde tocaba la bandura, y también se graduó. Fue a artes marciales en el octavo grado. Desde entonces, ha estado trabajando sobre la base de SC "Triumph".
Graduado de la Universidad de Educación Física y Deportes de Ucrania, licenciatura, especialidad "entrenador-profesor de boxeo tailandés" y "profesor de educación física". Ella ya completó su maestría en la especialidad "deporte" con honores, con un diploma rojo.
- Durante mis años escolares, era aficionado a varios deportes. En particular, actuó en competiciones de atletismo. También jugué baloncesto, y nuestro equipo escolar siempre fue el primero en la ciudad, recuerda Anastasia Kulinich. - Cuando fui a la escuela de música, conocí a Svitlana Polishchuk. Y nos hicimos amigos y fuimos juntos a la capilla de banduristas "Vesnyanka", actuamos juntos y fuimos a campamentos de salud.
El conocimiento de Svetlana jugó un papel importante: su amiga fue a las artes marciales y Nastya estaba interesada en esto.
- En un campamento de verano en Skadovsk, ya me había graduado de la escuela de música y decidí que quería hacer otra cosa, a saber, artes marciales. Me interesaba cómo hablaba Sveta sobre el entrenamiento, sobre el ambiente allí. Y en este campamento, donde estábamos, incluso entrenábamos por la mañana: corríamos, bombeábamos la prensa, entrenábamos flexibilidad. Recuerdo como en la mañana una vez corrieron sobre agua y arena para hacerlo más difícil. Nos dijeron que la inmunidad será mejor de esta manera. Pero después de esa carrera ambos nos enfermamos. Aún así, la inmunidad reaccionó de inmediato, - se ríe el ganador de los Juegos Mundiales.
Después de venir del campamento, la niña fue a la sección de artes marciales orientales. El entrenador Oleg Mykhaylenko inicialmente se mostró bastante escéptico con Nastya, pensó que ella, como muchos otros niños, solo tenía dos semanas, y eso fue todo. Pero la niña se quedó y asistió fielmente a las clases. Y así durante más de 10 años.
- Entonces tuve el deseo de inflar una prensa hermosa. Pensé que lo haría solo si iba a las artes marciales, sonríe Kulinich. - Me bombeó la prensa rápidamente. Pero para lograr el campeonato, fue necesario trabajar mucho más duro. Al igual que con la prensa, no funcionó. Pero ese fue mi primer pequeño, pequeño paso hacia las artes marciales.
La niña fue tarde a las artes marciales, cuando estudiaba en el octavo grado. Archivo fotográfico de Anastasia Kulinich.
Un día y medio en el camino
Los Juegos Mundiales se han convertido en el torneo más serio en la carrera deportiva de Anastasia hasta el momento. Y no es de extrañar que los Juegos Mundiales sean los Juegos Olímpicos entre los deportes no olímpicos. De hecho, no hay un paso más alto. Y esto tuvo un efecto psicológico en el atleta, porque ir a un torneo así ya es una gran responsabilidad. Y para ir durante la guerra es aún más.
- Por supuesto, la guerra tuvo un impacto, eso es 100%. Estuve preparándome para los Juegos Mundiales durante cuatro meses. Aunque soy psicológicamente fuerte, la guerra es completamente diferente. Por ejemplo, íbamos a entrenar, había una sirena, nos perdimos el entrenamiento. Y en otra ocasión decidimos que íbamos a poder seguir entrenando, pero hubo bombardeos en la fábrica de al lado. Y todo comenzó a temblar: las paredes, etc. Es imposible entrenar y esperar a que suceda algo terrible. Por supuesto, dudé, pero el entrenador Oleg Mykhaylenko decidió con firmeza y como entrenador que debería ir al extranjero y prepararme psicológica y físicamente allí, - dice nuestro interlocutor. - Es por eso que decidimos todo literalmente en una noche con Oleg Igorovich. Es un hombre muy fuerte. También es difícil dejar que tu protegido vaya a ser entrenado por otro entrenador. Pero en tal situación, dejó a un lado todas las emociones y decidió que sería mejor así.
Así comenzó el largo viaje de Anastasia.
- Hubo dificultades. En la frontera entre Ucrania y Polonia, el tren se detuvo durante diez horas. Había una cola enorme. Es bueno que los voluntarios polacos nos hayan alimentado bien. Y luego el control de pasaportes: tardó un día y medio en llegar, dice el campeón. - Pero luego, en Polonia, perdió su parada y no se bajó donde debería. Afortunadamente, hubo personas, también ucranianos, que me ayudaron: descubrieron que si llegaba a la estación final, todavía tomaría mi tren allí. Me bajo en la terminal y veo que el tren que necesito está esperando a Liberec en la República Checa. Es solo un poco de suerte. O las oraciones de mi entrenador y mi madre me ayudaron mucho, todo salió aún mejor, porque no terminé como había planeado al principio.
El atleta estuvo dos meses y medio en la República Checa. Allí se entrenó bajo la dirección de Peter Nakonechny. Pero su corazón se quedó con la Patria.
- Un día, durante una conversación, mi madre dice: "Hija, te extrañé mucho". Y entiendo que ahora lloraré por estas palabras, porque también estoy aburrido. Pero tengo que controlarme. Y para no llorar, respondió muy bruscamente: "¡Mamá, no quiero volver a escuchar esas palabras! No echo de menos a nadie, y tú tampoco", dice Anastasia Kulinich. - Mi madre, Angela Oleksandrivna, siempre me entiende en un nivel intuitivo. Y no hubo más conversaciones de este tipo.
Nastya solo soñaba con inflar hermosos abdominales. Pero me enamoré de este deporte. Archivo fotográfico de Anastasia Kulinich.
Esta es mi contribución a nuestra victoria.
Después de la República Checa, Nastya fue a Tailandia con nuestro equipo nacional, donde pasó 6 semanas preparándose para los Juegos Mundiales. Y luego se fue a los Estados Unidos.
- Mi preparación moral para los Juegos comenzó cuando me fui de Ucrania a la República Checa. El boxeo es un deporte de contacto. Y el ajuste psicológico es siempre una de las etapas más difíciles. Pero si confías en tus habilidades, entonces todo es más fácil. La preparación fue realmente muy buena, respiré correctamente, estaba fuerte físicamente y, por supuesto, me ayudó a adaptarme, - dice el campeón. - Recordé cuánto había pasado - y había pasado mucho, y no había vuelta atrás. Muchos entrenadores que estaban cerca de mí invirtieron su trabajo en mí. Mi familia también me apoyó. Los organizadores ayudaron: personas que hicieron todo lo posible para que nos fuéramos, y nuestros soldados que defienden Ucrania, para que yo tuviera la oportunidad de defenderla ya en competiciones internacionales a nivel deportivo. Y en cierto modo, esta es mi contribución a nuestra victoria, porque no soy una guerrera, soy una niña, pero hago lo que puedo. El estrés y la carga psicológica eran enormes, pero recordar todo lo mencionado anteriormente ayudó. Y nos las arreglamos.
Con la madre Angela Oleksandrivna. Archivo fotográfico de Anastasia Kulinich.
Todas las emociones se mezclaron
- El partido final parecía ser el más difícil, porque no había tiempo para la recuperación. Además, mido 1,7 metros, compito en la categoría hasta los 48 kilogramos y mi peso estaba equilibrado en esta marca. Quien siga una dieta determinada y reduzca el peso comprenderá cuál es la dificultad, explica el campeón de los Juegos Mundiales.
Los oponentes son lo mejor de lo mejor, gente con mucha experiencia: campeones mundiales, ganadores de premios, campeones en peleas profesionales. Estos últimos están mucho más preparados, desde el punto de vista físico.
- Había concentración, responsabilidad, una mente fría. Por supuesto, hay experiencias en cualquier pelea. Ya sé por experiencia propia que es malo cuando no están. Es mejor estar un poco nervioso, admite Anastasia Kulinich.
Y ese fue el momento en que el juez levantó la mano del ganador.
- Honestamente, hubo emociones encontradas: cansancio, alegría, incluso comencé a enloquecer un poco de manera femenina, estaba enojado por esta situación en el país que tuve que salir temprano para entrenar. Todo esto se mezclaba con pensamientos sobre la guerra, que hacía mucho tiempo que no veía a mi familia. Y la alegría que hice por Ucrania, por nuestros soldados de las Fuerzas Armadas, que defienden nuestro país. Lloré en el podio, fue una liberación de emociones tan poderosa, dice el atleta.
Esta frágil y encantadora chica puede "cortar" a cualquier matón. Archivo fotográfico de Anastasia Kulinich.
Le gusta la bicicleta y los dulces.
Actualmente, Anastasia se encuentra de vacaciones, pero la deportista asegura que no tardará mucho, pues muy pronto comenzará el parón deportivo y querrá nuevos logros.
- Espero que todavía haya Juegos Mundiales en mi vida, - la niña sonríe.
¿Qué más se puede decir de Anastasia? Es consultora de nutrición y ayuda a las personas a cambiar su estilo de vida a uno más correcto. En su tiempo libre se las arregla para leer libros biográficos sobre atletas, actores y otras personas exitosas. Quiere mejorar sus conocimientos en el campo de la dietética, aprender más idiomas extranjeros, así como renovar sus lecciones de bandura y cantar canciones ucranianas. Ella dice que puede ayudarla a sacar fuerzas para nuevos logros.
Le encanta andar en bicicleta. Francamente, no le gustan los clubes ruidosos. A veces se entrega a los postres. Enamorado
¡Es la primera en la historia de Ucrania en convertirse en campeona de los Juegos Mundiales de boxeo tailandés!.
Por YAROSLAV KULISCH/Kp.ua
No hay comentarios.: